Cómo hacer un baño de leche para tener una piel más hermosa

Te propongo hablar un poco de historia... Seguro que conoces a Cleopatra, la reina de Egipto que hechizó a Marco Antonio, quien estaba loco por ella, ¿verdad? Algo por lo que Cleopatra era muy famosa eran los baños de leche que realizaba y que hacían que su piel se viera increíble. 

 

Un baño de leche puede convertirse en algo muy relajante y beneficioso para la belleza de tu piel si sabes cómo realizarlo. Como ahora es imposible que Cleopatra te cuente cómo hacerlo, a menos que tengas la máquina del tiempo y puedas viajar al pasado, me toca a mí explicarte qué es lo que necesitas y cómo hacer un baño de leche para que tu piel y tu cabello se nutran y tengan una suavidad increíble.

 

Prepara tu propio baño de leche

Qué necesitarás

5 l de leche entera (¡nada de descremada!)

100 g de pétalos de rosas 

10 cc de aceite esencial de rosa, sándalo o lavanda

sal marina de buena calidad

aceite de almendras, cantidad necesaria

líquido para baño de burbujas

un cepillo o esponja vegetal

2 toallas grandes de baño

velas aromáticas y música instrumental (opcional)

 

Cómo darte un baño de leche

Llena la bañera con agua caliente.

 

Añade la leche caliente, el baño de burbujas, el aceite esencial que has elegido y los pétalos de rosa.

 

Entra en la bañera y limpia tu rostro con el aceite de almendras mientras lo masajeas muy suavemente. Espera a que la bañera se llene de vapor, así se abren 

tus poros y el aceite penetra mejor en tu piel.

 

Ahora solo queda que te relajes y disfrutes de la sensación de la leche caliente y los pétalos de rosa sobre tu piel. Permanece unos 30 minutos en la bañera escuchando música instrumental (no olvides encender las velas aromáticas).

 

Toma un poco de sal marina y masajea tu piel en forma circular. Esto te servirá para eliminar células muertas y hacer que se vea muy suave.

 

Finalmente, enjuaga tu cuerpo muy bien evitando el uso de jabones sintéticos de cualquier tipo.  

 

¿Una recomendación? Haz los baños de leche un rato antes de irte a la cama. De esta forma, te relajarás y podrás dormir como un bebé.

 

¿Entiendes por qué Cleopatra tomaba baños de leche? ¡Es genial! Se trata de una gran manera de quererte a ti misma y verte siempre fantástica. ¡Pruébalos tú también!