Miércoles, 6 de diciembre del 2017
¿Por qué respirar hondo te cambia la vida, según la neurociencia?
Una investigación con base en grabaciones realizadas desde el cerebro de humanos sometidos a neurocirugía muestra que la respiración puede transformar el cerebro.
Dos hallazgos han desconcertado a los expertos. Por un lado, a través de la regulación voluntaria de la respiración es posible activar zonas del cerebro que en general no están bajo un control consciente. Por otro lado, la capacidad de controlar la inhalación y la exhalación tiene un efecto profundo en el comportamiento.
La respiración profunda y su efecto cerebral
El novedoso estudio muestra que la conciencia y el control de la respiración sincronizan la actividad de ciertas zonas cerebrales, lo que puede derivar en mayores control emocional, relajación y concentración.
¿En qué consistió la investigación?
El estudio, a cargo de los médicos José Herrero y Ashesh Mehta, del Hospital Universitario NorthShore en Long Island, se centró primero en observar la actividad cerebral de los pacientes mientras respiraban. Luego, se les dio una tarea simple para distraerlos, debían hacer clic en un botón cuando aparecían círculos en la pantalla de la computadora.
Eso le permitió a los expertos observar lo que pasaba cuando las personas respiraban naturalmente sin concentrarse en su respiración. Después, se les pidió a los pacientes que le prestaran atención a su respiración y que contaran sus respiraciones.
Los científicos notaron que, al cambiar la respiración, la actividad cerebral también cambiaba. En este sentido, el cambio en la respiración lograba activar diferentes partes del cerebro.
El control voluntario de la actividad neuronal
Además de poder estudiar la capacidad de los humanos para controlar y regular la actividad neuronal de forma voluntaria a través de la respiración, la investigación se diferenció al utilizar un método poco común. Se trató de observar dentro de los cerebros de humanos despiertos, sin acudir a las técnicas de imagen que suelen utilizarse en este tipo de experimentos.
En cambio, se utilizaron electrodos implantados en el cerebro de los pacientes como parte de un tratamiento clínico para la epilepsia. Los resultados demuestran que los consejos de «respirar hondo» o «respirar profundo» no son simplemente porque sí. La respiración profunda permite la conectividad entre las partes del cerebro y acceder a sitios que normalmente son inaccesibles.
La próxima vez que te sientas estresado, abrumado con pensamientos negativos o simplemente desconcentrado, utiliza la respiración profunda para oxigenar el cerebro, eliminar las preocupaciones y enfocarte en el presente.
No es la primera vez que un estudio sugiere que la respiración profunda tiene un gran impacto en el cerebro, incluso es utilizada para tratar algunos tipos de trastornos de ansiedad mediante algunos ejercicios. Cambiar los patrones de respiración permite cambiar el estado emocional, la manera de pensar y la manera de interactuar con el mundo.