Miércoles, 28 de febrero del 2018
Durante el primer y segundo trimestre del embarazo, por lo general, no hay ningún problema al viajar en avión ni hay una distancia no permitida. Sin embargo, es buena idea que consultes a tu médico antes de planear un viaje en avión si has tenido algún problema durante tu embarazo, como por ejemplo:
-Una pérdida de sangre
-Diabetes
-Hipertensión
-Un parto prematuro en un embarazo anterior
Infórmale a tu médico si piensas viajar a otro país, en caso de que exista algún factor que haya que tener en cuenta, como por ejemplo si hay que ponerse algunas vacunas que podrían ser perjudiciales durante el embarazo.
El segundo trimestre, de la semana 14 a la 27, suele ser la época en que es más fácil viajar. La mayoría de las mujeres ya no sienten tantas náuseas en ese periodo y tienen más energía.
Si se trata de un viaje de negocios, en esta etapa también puedes sobrellevar mejor los calendarios estrictos y los horarios irregulares.
También es ideal aprovechar ese momento para disfrutar de tus últimas vacaciones a solas con tu pareja.
Si no esperas gemelos y has tenido un embarazo sin complicaciones, puedes volar hasta la semana 36. Sin embargo, algunas aerolíneas no te permitirán viajar si tienes más de 28 semanas de gestación debido al riesgo de que tengas un parto prematuro durante el vuelo.
Viajar en avión durante el embarazo puede aumentar ligeramente el riesgo de que tengas trombosis (coágulos) y várices en las piernas. Hay medias de compresión que favorecen la circulación y alivian la hinchazón en las venas. También hay medias fabricadas especialmente para los viajes en avión. Para que funcionen mejor, póntelas antes de salir de la cama por la mañana y déjatelas puestas todo el día.
El cinturón de seguridad, como el del coche, se sitúa por debajo de la barriga, desde las caderas.
Llevate todo lo que creas que vas a necesitar en el viaje, aunque luego no lo uses.
Camina cada una hora para evitar edemas en los pies.
Comé solo lo que realmente te dé ganas, ya habrá tiempo para nutrirte a fondo cuando llegues. No sobrecargues el estómago.