Viernes, 11 de mayo del 2018
La crema Budwig fue desarrollada por una científica alemana que dedicó gran parte de su carrera al estudio del efecto de los ácidos grasos en el metabolismo humano.
Beneficios de la crema Budwig
Con el ácido linoleico como protagonista, esta crema te ofrece multitud de bondades, en forma de aceite de linaza combinado con queso magro.
Se trata de un ácido graso esencial al que, junto con sus derivados, se conoce como ácidos grasos omega 6. Su ingestión proporcionada te ayuda a disminuir la presencia en la sangre de los triglicéridos y disminuir la presión arterial.
Las propiedades de la crema Budwig son unas grandes aliadas para reducir el riesgo de contraer enfermedades del sistema circulatorio y contribuyen al correcto funcionamiento del sistema nervioso y visual.
Receta de la crema Budwig
La receta oficial parte del empleo de seis cucharadas de requesón o quark con un máximo de un 2 % de grasa, a las que, a continuación, añades tres cucharadas de aceite de semilla de linaza.
Te recomendamos no mezclar a mano, sino con una licuadora o batidora, suavemente y durante un minuto. La consistencia que debes conseguir es como la de la crema batida.
Son premisas imprescindibles que el aceite sea de la máxima calidad y te asegures de que no se oxida ni se vuelve rancio.
A partir de aquí, hay multitud de variantes, que incluyen zumo de limón, frutas de temporada, cacao puro, coco rallado, frutos secos o canela, entre otras.