Comer sandía en el embarazo: 10 saludables razones para incluir esta fruta en tus comidas

Miércoles, 1 de agosto del 2018

Si bien la sandía es recomendada para la mayoría de las personas, los beneficios se potencian todavía más en las mujeres embarazadas. Presta atención, si te encuentras en la dulce espera, aquí te contamos 10 razones por los cuáles deberías comer más sandía.
 
Beneficios de la sandía en el embarazo
1. Alivia la acidez estomacal: problemas digestivos como la acidez son comunes en las embarazadas, pero la sandía al ser muy suave para el estómago y el esófago funciona perfectamente para aliviar estos problemas.
 
2. Diurético natural: está compuesta por un 95 % de agua, motivo por el cual elimina las toxinas dañinas para el organismo al mismo tiempo que reduce los niveles de ácido úrico en la sangre.
 
 
 
3. Reduce la hinchazón: debido a su alto contenido de agua, reduce las obstrucciones en las venas y los músculos y ayuda a prevenir el edema común en pies y manos durante el embarazo.
 
4. Reduce los calambres musculares: el consumo de sandía ayuda a lidiar mejor con los cambios que se producen en el cuerpo durante el embarazo y aliviar los calambres musculares.
 
5. Calma las náuseas: gracias a su poder energizante, que previene la aparición de náuseas matutinas.
 
6. Previene la deshidratación: debido al alto nivel de agua en la sandía, se recomienda a las mujeres embarazadas que las incluyan en su dieta para estar siempre bien hidratadas, ya que la deshidratación puede provocar contracciones prematuras.
 
 
7. Facilita la digestión: como la sandía es un alimento suave para el intestino, facilita la digestión de los alimentos y si te encuentras con estreñimiento, una buen opción sería comer sandía.
 
8. Previene la pigmentación: la pigmentación de la piel en varias partes del cuerpo está relacionada con limpieza regular del cuerpo y como la sandía facilita la digestión, ayuda a prevenir las manchas en la piel que son comunes durante el embrazo.
 
9. Nutrientes necesarios: la sandía contiene vitaminas A, C y potasio, nutrientes necesarios para el correcto desarrollo del bebé y la buena salud de la madre.
 
10. Fortalece tu inmunidad: el licopeno, antioxidante presente en la sandía en grandes cantidades, previene el riesgo de sufrir preeclampsia, cáncer y enfermedades cardiovasculares, ya que aumenta la inmunidad del cuerpo a las infecciones.
 
 
De igual forma, no debes limitar solo tu dieta a la sandía, ya que tu cuerpo necesita también ingerir otro tipo de nutrientes sumamente necesarios para el correcto desarrollo de tu bebé y que te mantengas fuerte durante todo el embarazo. Consulta con tu médico para que evalúe un plan de alimentación acorde a tu necesidades.

 

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