Dermatólogos recomiendan los mejores aceites naturales para que tu piel brille

Viernes, 19 de octubre del 2018

Hay más de una opción accesible para potencial en encanto de tu piel, como confirmaron los dermatólogos Eric Schweiger y Julia Tzu al Huffington Post.

Eso sí, antes de aplicar cualquiera de estos aceites sobre una superficie extensa de piel, es recomendable que verifiques que no eres alérgica. Para ello, aplica un poco del aceite sobre una porción de tu antebrazo y observa cómo reacciona tu dermis en las siguientes 24 horas. Si no notas enrojecimiento, picazón o algún otro tipo de molestia, podrás extender su uso con total tranquilidad.

Aceites naturales para cuidar la piel

Aceite de oliva

El aceite de oliva contiene propiedades hidratantes y antioxidantes; el dermatólogo Eric Schweiger asegura:

«Uno de los antioxidantes es llamado escualeno y funciona bien para hidratar la piel, los labios y las cutículas del cabello».

Aceite de semillas de uva

Este aceite tiene una rápida absorción. Aporta ácidos grasos esenciales y vitaminas C, D y E, todo lo que contribuye a hidratar la piel.

Aceite de girasol

Es uno de los aceites más accesibles. Previene la pérdida de agua de la piel, lo que la mantiene suave y flexible. Tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que protegen la piel de la contaminación y de los rayos UV.

Recomendaciones finales

Si bien son productos hipoalergénicos que no provocan grandes daños, las personas con acné o de piel grasa deberían evitarlos: el aceite puede obstruir los poros y favorecer la aparición de granitos.

Recuerda que ningún aceite es mágico, por lo que si quieres lucir la mejor versión de tu piel, también:

Protege tu piel del sol siempre, no solo cuando vas a la playa. Consulta a un dermatólogo para que te recete el mejor protector para tu tipo de piel.
Cuida tu alimentación. Lleva una dieta balanceada, rica en proteínas magras, granos, semillas, frutas y verduras. No olvides darte algún que otro gustito: un estado de ánimo luminoso hará que tu piel brille mucho más.
Bebe agua. En lugar de cargar tu organismo con las calorías vacías de las bebidas azucaradas, elige el agua. Procura tener siempre un vaso o una botellita cerca para hidratarte bien.
Mantente en movimiento. No tienes por qué ser una maratonista; solo recuerda que una vida más activa favorece la eliminación de las toxinas que opacan tu piel (y tu vida en general).