Lunes, 14 de enero del 2019
La mayoría de nosotras tenemos manías que sin darnos cuenta arruinan nuestra belleza, ya sea porque estamos nerviosas, estresadas o simplemente no tenemos ni idea de por qué lo hacemos, pero ahí están y al parecer son casi inconscientes, pero es momento de enfrentarlas y transformarlas en hábitos saludables para lucir radiantes en cualquier momento.
1. Morderte las uñas: esta es una de las manías más comunes que pueden acabar con la belleza de tus manos, si bien es una manera de ‘calmarte’ cuando estás nerviosa o ansiosa, tus uñas se verán descuidadas y nada saludables.
Para evitarlo, puedes usar un top coat de ajo, ¡sí, así como lo oyes! Ya que éste da un sabor desagradable que te recordará que no debes hacerlo, la ventaja es que no huele feo, sólo tiene el sabor (por fortuna).
2. Exprimir barritos: resistirte a exprimir ese horrible granito no es tarea fácil, pero es mejor no hacerlo, ya que además de que empeorarás la situación al dejar la zona lastimada y mucho más visible, ésta se puede infectar y dejar una mancha terrible sobre tu rostro.
Lo mejor es poner un poquito de hielo para disminuir la inflamación y aplicar un producto específico para eliminar imperfecciones. Con un poco de paciencia, tu amigo inesperado se irá en menos de una semana y sin dejar huella sobre tu piel.
3. Tocarte el pelo todo el día: si te encanta hacerlo, es momento de olvidar esta manía que no solo arruina la belleza de tu melena, sino de todo lo que tocas después de hacerlo, ya que el cabello produce una grasa natural que, al contacto con cualquier zona de tu cuerpo se contamina y puede provocar imperfecciones.
Si a esto le sumas, todo lo que tocan tus manos durante el día, te dará cuenta que, es un intercambio interminable de bacterias y suciedad. ¡Evítalo!
4. Chuparte los labios: es muy común que cuando se resecan los labios, lo más sencillo sea ‘chuparlos’ para hidratarlos, pero esto es un grave error, ya que sólo conseguirás que se deshidraten aún más y, si te arrancas los pellejitos, éstos pueden partirse y dejar heridas expuestas que son todo, menos sexys y, además ¡arden cuando comes!
Lo mejor es aplicar un bálsamo labial extra humectante para eliminar la resequedad, si eres constante, tus labios se recuperarán en poco tiempo.
5. Quitarte el esmalte con los dientes: sabemos que no siempre tenemos el suficiente tiempo para ir a hacernos el mani, peroooo…. al menos tómate cinco minutos de tu día para retirar el esmalte con los productos adecuados, ya que al hacerlo con los dientes, tus uñas se desgastan y comienzan a formarse surcos que las van deformando; además, también se daña el esmalte de tu dentadura.
Si aplicaste gelish o acrílico, acude a un especialista, ya que si lo haces tú misma, las uñas se maltratan aún más, se descarapelan, se debilitan y se astillan. No quieres eso, ¿verdad?
Vía GLAMOUR