Lunes, 13 de mayo del 2019
La felicidad casi siempre la asociamos con lo bonito, con el amor y con todo aquello que nos agrada... pero a pesar de eso, hay algunas verdades que debemos de pasar, conocer y aceptar para poder ser felices plenamente.
Según la psicoterapeuta Linda Espósito, estas verdades son pruebas que nos pone la vida y que sin duda nos enseñarán que ser feliz es 100% posible, a pesar de todo.
1. La vida no será fácil:
La mayoría de nosotros nos mantenemos felices cuando las cosas marchan como deseamos. Sin embargo, esto no es para siempre aunque a veces pensamos que sí lo es. La vida nos pone enfrente obstáculos que nos hacen apreciar las pequeñas cosas de la vida y lo felices que nos hacen.
2. No siempre obtendrás lo que te mereces
Puede ser que seas muy buen trabajador, estupenda persona y una pareja increíble. Esto no significa que la vida te retribuya con un momento eterno de felicidad. Es probable que, a pesar de que tengas todo lo que necesitas para ser feliz, siempre pase algo o sientas que te falta algo para serlo. Esto, aunque no lo creas, te vendrá de maravillas para poder apreciar los momentos en los que eres feliz y atesorarlos.
Esto cuesta aceptarlo, pero los momentos dolorosos pueden ser mayores que los felices. Lo que deberíamos hacer es aprender a reconocerlos y ponerlos a nuestro favor. Seguramente de todo lo malo sale algo más que bueno.
Existen diferentes tipos de dolor que pueden interrumpir nuestra felicidad. Puede ser que se trate de algo grave como el fallecimiento de un ser querido o la aparición de una enfermedad, los cuales interrumpan tu vida y te alejen de la felicidad. Sin embargo, el dolor o malestar no siempre tienen por qué ser graves.
Puede ser que se trate de cosas mínimas que sumen una gran cantidad de decepciones. Pero no siempre el dolor opaca la felicidad del todo. Muchas veces ocurre que los problemas nos fortalecen y nos permiten ser felices, a pesar de todo.
Parece una paradoja. Ningún ser humano vive feliz todo el tiempo y a veces es necesario pasar por un episodio doloroso para poder disfrutar y valorar los momentos de felicidad que la vida nos brinda.