Sábado, 12 de octubre del 2019
Las extensiones de pestaña no tienen nada de parecido a las postizas, ya que estas se tienen que aplicar por una persona experta, se ponen de una por una, en vez de una tira. Si se tiene el cuidado adecuado te pueden durar de seis a ocho semanas.
1. Lo barato sale caro
Siempre antes de ir a ponerte las pestañas tienes que checar referencias del lugar porque puedes terminar con una mala aplicación o una infección.
2. Son caras de mantener
Requieren de estar en mantenimiento cada dos o tres semanas, aunque no es el mismo precio que pagaste al principio. Entre más tiempo pase entre cita y cita, ocuparas más pestañas y esto puede que eleve el precio.
3. No son para todas
La longitud y la cantidad de las extensiones depende de la fuerza de tus pestañas naturales para así no se quiebren.
4. No te puedes bañar 24 horas después
El pegamento puede tardar de 12 a 24 horas en secarse. También, después de la aplicación se debe de tener cuidado con la cantidad de agua que les cae a las extensiones.
5. Requieren peinarlas diario
Por las actividades del diario, las extensiones se pueden enredar, así que es necesario que se peinen con un cepillo amablemente.