Jueves, 31 de octubre del 2019
Llevar una vida cargada de compromisos y responsabilidades no es cosa fácil. El estrés, la falta de sueño y una rutina de cuidado del rostro deficiente pueden traer como resultado una apariencia demacrada, sin vida, con ojeras e incluso cansada.
Por ello, es que resulta fundamental hallar la causa y erradicarla cambiando pequeños hábitos que tendrán una gran repercusión en tu apariencia. Aquí te compartimos algunas razones por las que podrías lucir cansada todo el tiempo y qué hacer para cambiarlo.
El rostro es lo primero que observan las personas de ti. Asimismo, las espinillas o manchas que aparecen de vez en cuando podrían tener decir mucho sobre tu salud.
Razones por la cual tu rostro se ve demacrado
Estrés
Este provoca que los niveles de cortisol de tu organismo se eleven y que la circulación de la sangre se concentre más en tus órganos vitales y no en tu cara, lo que te hará lucir cansada, hinchada y con poca vitalidad. Para combatir esta condición, lo más recomendable es que te tomes 30 minutos para meditar al iniciar y al terminar el día. Cada vez que sientas que las preocupaciones se apoderan de tus pensamientos intenta hacer ejercicios de respiración.
EXPOSICIÓN AL SOL
Los rayos UV son uno de los principales enemigos de un rostro joven y saludable. El daño solar debilita el colágeno y por lo tanto promueve los signos del envejecimiento, además de que promueve la aparición de manchas en el rostro y -en el peor de los casos- aumenta las probabilidades de padecer cáncer de piel lo mejor es que jamás olvides aplicar diariamente un protector solar.
Falta de agua
Nuestro cuerpo está compuesto en un 70% de agua, por lo que beber pocos líquidos es sinónimo de estreñimiento, cansancio, dolores de cabeza y muchos otros inconvenientes. Al beber ocho vasos de agua al día como mínimo ayudarás a mantener la belleza de la piel de tu rostro, ya que esta ayuda a reponer los tejidos, así como a hidratar el cutis y aumentar su elasticidad. Además, la piel hidratada disminuye cicatrices, acné y síntomas de envejecimiento como arrugas y ojeras.