Jueves, 19 de diciembre del 2019
Las formas más comunes por las que te puedes dar cuenta de que la piel tanto de la cara, como de las manos, muestra que no está siendo protegida de forma correcta para este clima son: la irritación, se puede distinguir un ligero enrojecimiento en las mejillas o nariz.
La resequedad, especialmente en la zona de los labios, frente y manos, donde se ven quebrantados o con grietas debido a la falta de hidratación.
Esto se debe a que la piel no cuenta con la cantidad necesaria de aceites naturales que la mantengan humectada, ocasionando que la humedad se evapore de manera muy rápida, ocasionando que la capa superior se deshidrate.
Para la cara
Sin duda, lo que más te debe interesar proteger es la cara, debido a que está expuesta directamente a los agentes agresores. Dos productos son los que no te deben de faltar: el primero, un suero en presentación de aceite.
En general estos se pueden usar en cualquier momento del año, pero durante la época de invierno su textura untosa va mejor con el clima frío. Por otra parte, el humectante, te recomendamos que sea en forma de crema.
Existen muchas versiones de cremas o sueros que contiene aloe y acido hialuronico asi como minerales que te srviran para mantener sellada la humedad.
Para labios
Los labios al ser la única parte del cuerpo que no cuenta con glándulas sebáceas se deshidratan de forma rápida, especialmente durante la temporada invernal. La manera de mantenerlos bien cuidados es muy simple; un bálsamo es el aliado perfecto para mantenerlos humectados.
Busca uno que tenga como ingrediente principal el aceite de jojoba, manteca de karité o cera de abeja, cualquiera de ellos funciona para retener la humedad en los labios.
Para manos
Te recomendamos que, para evitar sentir tus manos agrietadas y resecas, apliques por las mañanas una crema humectante que esté diseñada exclusivamente para esa parte del cuerpo.
Para ojos
En los ojos está la piel más delicada y delgada de todo el cuerpo, de ahí que durante el invierno sea indispensable un cuidado especial. En general, todos los productos enfocados en esta área son fórmulas frescas, ligeras y de tacto frío, ya que su objetivo es desinflamar e hidratar intensamente.
Barba
En cuanto al cabello, ya sea el de la barba o el cabello, lo que sucede durante la época de frío, es que se deshidrata o reseca de forma muy rápida. Esto debido a la poca humedad que existe en el ambiente, y aunado a esto, el uso de calefactores son otro factor que fomenta un clima seco.
Para evitar que tu barba pierda su textura y humectación, es básico aplicar todos los días algún aceite a base de almendra, Vainilla, etc.
Cabello
La resequedad en el cabello es muy común durante en el invierno. Específicamente hablando del cuero cabelludo, el bañarnos con agua caliente, es otro factor que fomenta su deshidratación.
¿Cómo combatirlo? Te recomendamos que no uses shampoo diario, intercálalo con un acondicionador o inclusive algún tipo de bálsamo/crema para cabello.