Jueves, 1 de octubre del 2020
Como sabemos la cafeína tiene increíbles beneficios, pero cuando se trata de belleza, pareciera que se doblegan.
Seguramente, mucho habrás escuchado sobre las distintas formas de aprovecharlo dentro de tu rutina de cuidado de la piel y cabello, bueno, déjanos decirte que no es casualidad que el aceite de café cada vez gane mayor popularidad.
Tiene mucho que ver la forma en la que lo aplicas, dependiendo del tipo de resultado que deseas lograr.
Hidrata el cabello y estimula el crecimiento
Es un efectivo inhibidor de la dihidrotestosterona (DHT) una hormona androgénica presente tanto en hombres y mujeres, que debilita el folículo piloso, incentivando la pérdida capilar.
Además, al incentivar la circulación sanguínea, también puede ayudar a retener la humectación, haciendo que te olvides del cabello seco y opaco.
Disminuye la celulitis
Tal como las mascarillas exfoliantes con cafeína, el aceite de café es increíble para tratar la celulitis, con la diferencia de que consigue penetrar un poco mejor entre las capas de la piel.
Su gran cantidad de antioxidantes y su cualidad de mejorar la circulación sanguínea, mejora por mucho la apariencia y calidad de la piel.
Mitiga las ojeras
El café es un excelente descongestionante y desinflamante que ayuda de forma efectiva a desaparecer las ojeras y las bolsas de los ojos.
Bastará con aplicar una pequeña dosis de aceite de café para notar una diferencia rotunda.
Es un excelente antiedad
Gracias a su alta concentración de antioxidantes, vitamina E y ácidos grasos, protege la piel contra los radicales libres. Esto propicia la producción de colágeno, previniendo el envejecimiento prematuro y la piel opaca.
Aunque, idóneamente, el aceite esencial de café se extrae de los frenos verdes o tostados a través de un proceso de destilación en frío, también es posible preparar una versión casera igual de efectiva.
Seguramente te estarás preguntando cómo puedes hacer tu propio aceite de caf, pero aquí te diremos cómo lograrlo.
Ingredientes
• 1 taza de aceite de oliva, coco o almendras
• 3/4 taza de café molido
Preparación
1. En un frasco con tapa combina tu aceite elegido y agrega el café finamente molido. Cierra el frasco y agítalo hasta que ambos ingredientes queden perfectamente mezclados.
2. Una vez que obtengas una fórmula homogénea, déjala reposar entre tres y cuatro semanas para que el aceite absorba por completo las propiedades del café.
3. Ya que hayan pasado las semanas, cuela la infusión para eliminar los grumos y almacena tu nuevo aceite de café en un lugar fresco. ¡Listo!
Ojo, antes de aplicar cualquier tipo de ingrediente, especialmente en zonas delicadas como tu cara, recuerda que es importante revisar que realmente sea bueno para tu tipo de piel. Por otro lado, siempre recuerda consultar a un dermatólogo.