Lunes, 8 de noviembre del 2021
Al igual que sucede en una reunión familiar, las mesas en las bodas son pequeños núcleos de celebración y encuentro, lugares a los que los novios prestan una especial atención porque siempre mandan un mensaje. Elegir los imprescindibles que transmitan aquello que desea la pareja y aúnen elegancia y practicidad resulta más sencillo siguiendo las indicaciones de los expertos en decoración y estilismo.
En las mesas son indispensables los detalles, siempre que se quiera marcar la diferencia. Desde los materiales elegidos en la mantelería hasta la selección de las copas, pasando por los meseros y las minutas; descubrimos las claves para idear la más ideal.
Copas labradas
Bucear entre las tendencias que más triunfan en las redes sociales permite descubrir fenómenos que se repiten en las mesas de bodas más compartidas como las copas labradas. En el clásico tono blanco o transparente o en colores vivos como el azul, el morado el verde, esta cristalería de aires retro, suma cada vez más adeptos. Explican los expertos que en una paleta cromática compuesta por cuatro o seis colores, el de las copas labradas debería ser uno de ellos, que marcara un contraste con la mantelería.
Detalles rústicos
Siguiendo la estela del movimiento sostenible que impera en el sector nupcial, cada vez es más común incorporar a las mesas de boda elementos reciclados, diseños artesanales o creaciones de carácter local y rústico. Cestas, cajones, pequeños jarrones y recipientes antiguos cuentan con un espacio en el centro de la mesa, en espacios decorados con inspiración campestre y vintage.
Flores silvestres o fruta
Las flores visten una mesa y añaden romanticismo a la decoración del gran día. Escogerlas adecuadamente depende de las condiciones climáticas, de la paleta de color del gran día y del gusto de los novios. Centros de mesa de una sola flor, arreglos en altura o pequeños jarrones de flores individuales son las grandes tendencias del momento. En contrapunto a las tradicionales variedades florales, las frutas han ido ganando terreno en combinación con las propias flores o en solitario como grandes protagonistas de centros en forma de bodegón.
Mesa redonda
Pocas novias románticas pueden resistirse al encanto de una mesa imperial de aires palaciegos. Si bien resulta especialmente imponente y permite más invitados sentados, las redondas ganan por goleada entre las wedding planners, porque gozan de grandes ventajas. Son más cómodas para los invitados, porque pueden ver los rostros de todos los interlocutores; permiten que conocidos dentro de un mismo grupo mantengan conversaciones afines y disfruten más y son más sencillas de servir para el catering, lo cual supone una experiencia más segura.
Combinación de manteles
Como si de las piezas de un puzzle se tratara, los elementos que componen el área del plato, el bajoplato, cuenco, individual y mantel pueden seguir una misma línea cromática o jugar al contraste, siempre experimentando con los materiales. Propuestas estampadas junto a mantelería lisa, individuales de rafia en combinación con mantelería de lino o bajoplatos transparentes en mesas sin mantel y con servilletas muy especiales son algunas de las fórmulas que más buscan las prometidas.
Velas especiales
Son muchas las novias que hablan de la magia de las velas como elemento decorativo y como parte de la iluminación de un enlace. Elementos destacados en el estilismo de iglesias, también forman parte de centros de mesa y candelabros que visten los banquetes más sofisticados.