Viernes, 21 de enero del 2022
Los grandes líderes afirman que hoy el éxito se logra pensando en las necesidades individuales del grupo para así poder alcanzar una meta conjunta. "El nuevo estilo de liderazgo consiste en sacar lo mejor de los demás mediante la colaboración, el trabajo en equipo y el foco en una única misión para todos", dice Dan Schawbel en su libro ‘Back To Human (De vuelta a lo humano)’. Estas diez actitudes te convertirán en una jefa admirable.
Sé honesta
Schawbel realizó una encuesta a más de 6.000 personas en diez países y descubrió que la mayoría esperaba que sus líderes hablarán con honestidad y comunicarán sus necesidades. Dile a tus empleados siempre la verdad, aunque duela. Lograr objetivos será más fácil para quien conozca sus áreas de oportunidad.
Pide retroalimentación
Dar significa también recibir. Haz buenas migas con tu equipo y proponles que te comenten sus dudas, propiciando siempre el diálogo abierto. Solicita informes directos a los jefes de cada sección porque es posible que tengan visiones similares sobre algo o que alguien haya podido detectar algún detalle que no ves desde tu posición.
Consigue ayuda profesional
Para que nada te pille por sorpresa, empieza a capacitarte desde ya. ¿Recuerdas la frase "vístete para el trabajo que quieres, no para el que tienes"? Prepárate para estar cualificada cuando llegue ese momento. Haz cursos ‘online’, lee libros, ve a conferencias… También puedes buscarte un mentor o un ‘coach’ de negocios: los líderes crean líderes.
Sé empática
Estás lidiando con el estrés, pero tu personal también. Y no todos tienen los mismos conflictos y necesidades. El experto en productividad Dave Creshaw dice que es crucial que los colaboradores se sientan libres para organizar sus tiempos. Lo más importante es el resultado y, si tus trabajadores pueden entregar en plazo, lo demás puede solucionarse.
Felicita los logros
Según una investigación de Teresa Amabile, profesora de Harvard, los líderes pueden ayudar al grupo ofreciendo apoyo y premiando esfuerzos. Demuestra confianza en tu equipo. Si lo dejas triunfar solo, supervisandolo en la distancia, sentirá que es capaz. Varias empresas como Levi’s, American Eagle y Old Navy han creado un tablero en el que los jefes dejan mensajes inspiradores a sus empleados. Además, planean viajes y cenas para reforzar los lazos.
¿Egocéntrica? ¡Ni un poquito!
Ser la jefa no es sinónimo de sabiduría infinita o superior a la de las personas que están a tu cargo. Uno de tus colaboradores puede saber mucho más que tú sobre un tema. Aprende a escuchar y busca opiniones. Conecta de una forma sana con tus compañeros, el trabajo mejorará si te permites mirarlo desde diferentes ángulos.
Atrévete a ser creativa
Busca inspiración, presta atención a lo que ha sido efectivo en el pasado y ensaya distintas formas de estímulo e impulso. Motiva a tu equipo para que entre en acción. Apasiónate con tus ideas y objetivos, cumple las metas fijadas y crea condiciones en las que todos se sientan seguros. Un trabajador feliz siempre dará mejores resultados.
Mantén el contacto físico
A finales de los ochenta el ‘e-mail’ cambió la forma en la que los jefes se comunicaban; hoy existen aplicaciones para la productividad como Trello, y aunque son herramientas maravillosas, el contacto humano nunca podrá ser reemplazado. Si sólo te comunicas con tus trabajadores por medios electrónicos, la relación profesional será fría. Aunque tengas personal trabajando de forma remota, convócase al menos una vez al año y mantente presente con videollamadas.
Reconoce tus fallos
Eres humana y equivocarse forma parte del proceso de aprendizaje. Si metes la pata, pero trabajas en una solución, tu equipo seguirá a tu lado. Un error no es el final de tu carrera; perdónate, aprende, reconócelo y sigue adelante. Si deseas prevenir, lee ‘Los 10 errores más comunes que suelen cometer los líderes’ de Hans Finzel, ¡y toma buena nota!
Aprende a colaborar
Permítele a tu equipo tener voz y la oportunidad de aportar. Una gran líder busca activamente opiniones. ‘Facebook’ se ha caracterizado por hacer esto, ofreciendo a sus empleados talleres de creatividad y de ‘design thinking’ consiguiendo así abrir los canales de comunicación.