Martes, 3 de mayo del 2022
El vestido de satén de Louis Vuitton que lució Emma Stone en la alfombra roja de la MET Gala 2022 no se había visto nunca en público; sin embargo, ya la actriz lo había usado. Y no para cualquier ocasión, ya que fue el vestido creado para la fiesta posterior a su boda con Dave McCary en septiembre de 2020.
Louis Vuitton, que quiere dar un giro hacia la moda circular, ha dado un golpe de timón en el mayor evento de moda del año. A las otras 13 celebridades vestidas de la marca se les ofreció un traje hecho con piezas de colecciones antiguas, ¡algunas de las cuales tenían más de ocho años! ‘No hay mejor sensación que la de saber que tus creaciones seguirán vivas’, reveló ayer Nicolas Ghesquière, líder de un mensaje fuerte, ambicioso y revolucionario en el ámbito de la moda. ‘Aunque mi papel como director artístico es crear lo nuevo, me alegró mucho poder volver a explorar mis colecciones y diseños anteriores para la Gala del Met de este año. Nunca ha sido tan importante demostrar que los diseños deben hacerse para durar.'
La estrella surcoreana de El Juego del Calamar, Jung Ho-yeon, lució un minivestido de ante con recortes e inserciones de cuero que formó parte de la colección Crucero 2017 de la casa francesa, presentada en mayo de 2016 en Río de Janeiro. Todo ello, accesorizado con un par de botas de la pasarela Otoño/Invierno 2022-2023, vistas en la pasarela de la última Semana de la Moda de París. En cuanto a los vestidos de Gemma Chan y Cynthia Erivo, ambos procedían de la colección de Primavera/Cerano 2022, pero la capa de la primera se encontraba en la colección Crucero 2020, mientras que la segunda tenía un tocado diseñado con tejidos de archivo de la casa.
Emma Chamberlain lució un crop top beige de la colección Otoño/Invierno 2018-2019. Sophie Turner, embarazada, también hizo una llamativa aparición con un vestido de la colección Crucero 2016. Y Nicolas Ghesquière tomó de los archivos de Otoño/Invierno 2014-2015 los zapatos de tacón y los pantalones de cuero que llevaba la actriz noruega Renate Reinsve. Mismo material, distinto stock resucitado: Eileen Gun lució un vestido de cuero de la colección primavera-verano 2017.
Gucci, que diseñó el vestido de Billie Eilish, tampoco dudó en hacer de lo viejo algo nuevo. El traje de satén y encaje era ‘lo más ecológico posible’, según declaró la cantante a Vogue. La ética se extendía a sus zapatos, de cuero vegano.
Detrás del look principesco de Shawn Mendes también había un conjunto ‘reciclado’ de Tommy Hilfiger, como declaró la estrella con 26 millones de seguidores en Twitter.
No es la primera vez que los diseñadores recurren a piezas de sus colecciones anteriores para crear vestidos de alfombra roja, o de Oxfam, como Harris Reed, que diseñó el traje de Emma Watson en 2021, un vestido de novia jaspeado…
Como si se tratara de un pulgar en la nariz de la sobreproducción que está dañando el planeta, las casas más lujosas y las celebridades ahora están haciendo aceptable la revalorización de las piezas de sus armarios o de las existencias inactivas. Lo aplaudimos.