Lunes, 11 de julio del 2022
Las vacaciones son el momento ideal para muchas personas de ir a tomar el sol en la playa, ya sea para broncearse y tener un color de piel más atractivo, o simplemente para disfrutar de las bondades del buen clima; sin embargo, ¿qué tan segura es la exposición para nuestra piel?
“Tomar un poco de sol, entre 10 a 12 minutos, sea de manera cotidiana o cuando salimos de vacaciones, se considera relativamente sano y seguro”, aseguró Rodrigo Roldán Marín, responsable de la Clínica de Oncodermatología de la Facultad de Medicina de la universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Aunque pueda parecer breve, lo cierto es que está comprobado que este periodo es suficiente para que el cuerpo sintetice toda la vitamina D que necesitamos para absorber calcio.
“Eso no implica caminar semidesnudos por la ciudad; con exponer el dorso de las manos y la cara es más que suficiente”, añadió.
¿Qué pasa si pasamos demasiado tiempo bajo el Sol?
Pasar de ese límite temporal de 10 a 12 minutos podría representar un peligro para la salud de nuestra piel.
"Cuando salimos de vacaciones y queremos buscar un bronceado, es decir, que la piel se pigmente o se haga más oscura, eso, definitivamente, no tiene nada de sano. Esa pigmentación, el oscurecimiento, es un mecanismo de defensa de la piel contra los efectos nocivos de la radiación ultravioleta emitida por el sol”.
“Los riesgos más evidentes, los que la mayoría conoce, son las quemaduras solares, donde la piel se enrojece, se inflama y arde. Pueden ir desde enrojecimiento y ardor, hasta llegar al grado de generar ampollas. En cuanto a estas quemaduras solares, diría que lo menos importante es la quemadura, porque probablemente en una semana o 12 días se resuelve cuando se descama la piel y se genera piel nueva, y a la gente se le olvida el problema. Sin embargo, la piel tiene memoria y esas quemaduras de sol generan un daño permanente e irreversible, que seguramente se va a manifestar en 10, 15, 20 o hasta 40 años después como manchas, arrugas y, según la genética y el daño solar acumulado, puede dar lugar a cáncer cutáneo”.
¿Cómo protegerse correctamente del Sol?
De acuerdo con el especialista lo recomendable es adquirir un bloqueador solar, eminentemente mineral, ya sea con óxido de zinc o dióxido de titanio; hay que replicarlo, si estamos en la playa y no estamos acostumbrados a exponernos al sol, más o menos cada dos a tres horas o después de nadar o secarse con una toalla.
“Hay que incentivar a la gente a buscar un protector solar de farmacia, ni siquiera los comerciales, es decir: no el que compras en el supermercado o la tiendita del hotel, sino realmente ir a una farmacia y buscar un producto que sea lo más medicalizado posible”.
Si se va a la playa, se recomienda estar bajo la sombra en una palapa, idealmente usar lentes de sol oscuros y, si se puede, manga larga o pantalón largo/falda larga. Si se va a una zona de calor, lo ideal es utilizar un textil natural con algodón o lino para evitar el exceso de calor. Para las mujeres y hombres se recomienda usar un sombrero de ala que proteja el rostro, nariz, orejas y hombros.
"No le vamos a decir a alguien que huya del Sol porque hace daño. Sí tiene un efecto nocivo, pero, más bien, lo que tendríamos que hacer es adoptar medidas que eviten o minimicen esos riesgos y efectos nocivos de tomar el sol en la playa. ¿Qué significa esto? Tratar de evitar la exposición solar directa entre las 11 de la mañana y las 5 de la tarde”, apuntó.