Lunes, 5 de diciembre del 2022
No hay tradición más mexicana que el hecho de comer en la calle. A donde quiera que vaya y sin importar la hora, una persona puede estar segura de que encontrará un puesto o cualquier sitio donde pueda conseguir desde una botana ocasional o incluso, con un poco de suerte, se pueda topar co una comida completa a precios muy accesibles. De hecho si se piensa detenidamente, no hay comida más mexicana que aquella que se prepara al calor de un anafre colocado en alguna acera de la ciudad.
Lejos de la tradición y el sabor que implica comer en la calle, esta actividad también tiene sus contradicciones. Debido a la inmediatez que implica su consumo y preparación, algunos de estos alimentos, más que una bendición culinaria, son una bomba de enfermedades e infecciones. Aunque su peligrosidad no sólo tiene que ver con la higiene con la que fueron preparados; sino también factores verdaderamente fuera del control humano como la calidad del aire y la contaminación de las ciudades. Aunque al final, todo suma para que estas enfermedades invadan el sistema digestivo y —en ocasiones— se propaguen a todo el cuerpo.
Cuando el estómago es incapaz de procesar y o asimilar ciertos alimentos, aparece este problema que a pesar de ser lo más común del mundo, puede debilitar al sistema rápidamente debido a la gran pérdida de líquidos que implica.
Tifoidea
A pesar de que es una enfermedad casi eliminada, esta infección causada por beber agua contaminada o consumir alimentos con un proceso de limpieza poco confiable aún sigue apareciendo entre las personas que prefieren comer en la calle. Su peligrosidad radica en que sus síntomas —dolor de cabeza, fiebre elevada, dolor estomacal y diarrea— aparecen de manera gradual, lo que hace que el paciente los confunda con otras enfermedades.
Las toxinas liberadas por la bacteria Clostridium botulinum hacen que aparezca ésta que es considerada una de las infecciones estomacales más peligrosas. Debido a los vómitos y la dificultad para tragar, el botulismo es capaz de asesinarte si no se trata a tiempo.
Salmonelosis
La ingesta de carne contaminada es la primera causa de este problema; sobre todo las carnes rojas —cordero, res y cerdo— son las principales portadoras de este virus que, al igual que el cólera, es una de las infecciones estomacales más comunes provocadas por comer en la calle.
Gastroenterits
El causante de esta enfermedad también conocida como "gripe estomacal" es el norovirus. Este microorganismo puede alojarse en frutas y alimentos de origen animal que no han sido bien cocinados o procesados.
Hepatitis A
Si como buen mexicano una de tus actividades favoritas es comer en la calle; debes tener mucho cuidado de los lugares en donde vas a consumir tus alimentos, pues es probable que te contagies de esta enfermedad debido a las heces que vuelan en el aire.
Se estima que al menos 50 millones de personas en el mundo se enferman gracias a estos parásitos, lo que la convierte en una de las enfermedades gástricas más comunes. Así que si eres de los que acostumbra comer alimentos no cocinados como frutas en la calle, deberías considerar la desparasitación.
Cólera
A menudo la limpieza de los productos con los que se realizan ciertos platillos callejeros es realmente deficiente; si a eso le sumamos la dudosa procedencia del agua con la que se limpian las verduras, tenemos el coctel perfecto para que aparezca la cólera.
Gastritis
Si bien la bacteria llamada Helicobacter pylori —causante principal de esta enfermedad— es un organismo que vive exclusivamente en el cuerpo humano, hay otros factores que pueden desencadenarla como el consumo de alimentos demasiado picantes o irritantes.
Cisticercosis
Lo espeluznante de esta enfermedad es que se propaga a través de las heces humanas infectadas con tenias ¿Y entonces cómo llegan estas bacterias a nuestra comida? Sencillo, al hacerse polvo el excremento llega hacia todos lados a través del aire incluyendo la comida.
A pesar de ser una de las principales causas de estas enfermedades, la solución está en dejar de consumir alimentos en la calle; sino en asegurarnos que, al menos desde nuestra parte, las condiciones en que los consumimos seas las adecuadas para al menos poder asegurarle un poco más de seguridad a una de las tradiciones culinarias más queridas dentro de la cultura mexicana: la comida callejera.
Fuente: culturacolectiva.com