Miércoles, 26 de abril del 2023
Consideramos, que hablar de la higiene personal básica es un tema que todos dominamos a la perfección. Pero también debemos ser sinceros, y pueden existir situaciones donde se nos puede olvidar o no alcanzar el tiempo para realizar algún paso de higiene básica. ¿La mala noticia? Podemos generar una impresión negativa, puntualmente en aquellos días especiales, donde nuestra imagen juega un papel relevante: una primera cita, una entrevista de trabajo o un evento importante, son ejemplos de situaciones en donde la higiene personal básica tiene que sí o sí estar presente.
Una buena ducha siempre es necesaria
No podíamos empezar esta nota de higiene personal básica sin mencionar a la indispensable ducha. Si bien, algunos recomiendan no lavar el pelo diariamente, todo depende del tipo, lo que sí se debe hacer cada día es pasar por la regadera. Sin importar que prefieras el agua caliente o bañarse con agua fría (la cual recomendamos), lo necesario es realizarla. Además, nunca está de sobra recordar el kit fundamental: jabón de cuerpo, limpiador facial y shampoo (acondicionador si el cabello se lleva medio largo).
Higiene bucal
Estés soltero o en pareja, es necesario tener una buena higiene bucal. Recordemos que no basta con cepillar los dientes tres veces al día. También existen otros agentes que ayudan a tener una boca limpia: El uso del hilo dental en la noche para retirar residuos de comida; por otra parte, la limpieza de la lengua para acabar con las bacterias que se asientan ahí, finalmente, los enjuagues bucales son aliados para combatir los gérmenes del mal aliento.
Dar un buen corte a los vellos indeseables
Consideramos, que dentro del cuidado personal masculino general está el recortado de la barba y el bigote. Pero en la categoría de higiene personal básica se encuentra el eliminar todos aquellos vellos indeseables. Además de ser poco sexy, nunca juega a favor de nuestra imagen. Dentro de esta clasificación encontramos a los vellos que sobresalen de las fosas nasales, los de las orejas y también los que crecen en la espalda. Unas buenas tijeras o el uso de la máquina de rasurar, son los gadgets perfectos para decir au revoir a este trío de pelos.
Los pequeños detalles marcan la diferencia
Dejando a un lado la ducha, los demás aspectos mencionados se enfocan en pequeños detalles de nuestra imagen. Ejemplo de esto son las uñas. Si bien, no es necesario llevar un manicure y pedicure perfecto, sí es imprescindible unas manos y pies presentables. Con esto nos referimos a tenerlas libres de suciedad acumulada y bien recortadas (a menos de que las quieras dejar crecer). Las uñas de las manos siempre están a la vista de todos, de ahí su importancia. Mientras que las de los pies, deben estar listas para lucirse en cualquier momento íntimo.
El infalible aroma
Concluimos con una categoría amplia. La podemos dividir en tres momentos: desodorante, crema corporal y perfume. Al estar hablando de las reglas básicas de higiene personal, nos vamos a quedar solamente con la primera. El desodorante es un producto que no debemos olvidar aplicar. Su objetivo es ocultar el olor natural que produce nuestro cuerpo, el cual se ha asociado con un aroma desagradable. Hoy en día es un indispensable que se tiene que incluir en nuestra rutina de cuidado corporal.
Fuente. Vogue.mx