Viernes, 16 de junio del 2023
Cometer errores de vestir en la oficina no solo puede hacer que recibas un regaño por parte de Recursos Humanos, también puede afectar negativamente tu imagen, tu productividad y el hecho de que te tomen o no en serio.
Hay todo tipo de expertos que hablan sobre la importancia de tener una buena imagen cuando estás en la oficina (y tener al menos un power outfit), ya que esto puede aportar seguridad, confianza, cambiar la perspectiva de los demás y ayudar a que tu jefe note que estás ahí, el problema es que, cuando hace calor, lo único que se antoja es usar tan poca ropa como sea posible.
Pero a la oficina no se puede ir con ropa de playa o mostrando demasiada piel, hay cosas que están prohibidas incluso en los códigos de vestimenta más relajados, y que pueden hacer que quedes mal o te veas poco profesional, y eso no ayuda a creer carreras o a que te den aumentos.
El calor nos obliga a replantear la manera en la que nos vestimos, pero también existe la posibilidad de cometer errores, y hay unos cuantos que no se deben cometer en el lugar de trabajo.
Los errores de vestir en la oficina que debes evitar cuando hace calor
Usar materiales muy gruesos
Algunas telas y materiales son más pesados y protectores, lo que buscan es ayudar a protegerte del frío y a que las bajas temperaturas no te hagan temblar todo el día, esas no son ideales para el verano.
Lo mejor es cambiar materiales como la lana o la mezclilla muy gruesa por fibras más ligeras y frescas, como en el caso del algodón y el lino, tanto en camisas como en pantalones, para que puedas sentirte más cómodo y menos acalorado.
Quedarte con colores oscuros
Al igual que con los distintos materiales, hay colores que son más calurosos debido a que absorben la luz. En la primavera, el verano o en las olas de calor, lo mejor es quedarte con tonos claros, que reflejan la luz, o ligeramente más llamativo, desde el blanco y el azul muy claro, hasta tonos como el rosa, el verde y otros que correspondan con esos tonos que asociamos con la temporada de calor.
Ir demasiado casual o mostrar demasiada piel
El hecho de que haga calor no quiere decir que puedas presentarte a trabajar con un par de shorts y una tshirt, lo que hay que hacer es aprender a adaptar esos elementos como parte de un look más profesional.
Si vas a usar una tshirt, por ejemplo, hay que hacerlo con pantalones de vestir o incluso con un saco ligero, mientras que los shorts se pueden usar como parte de un traje, siempre y cuando estén permitidos claramente en el código de vestimenta, y en ese caso no deben ser muy cortos.
Zapatos abiertos
Las sandalias no son para la oficina, son para la playa, la alberca o para relajarte el fin de semana, pero, como regla general, es mejor no llevarlas en un contexto profesional.
Lo que puedes hacer es recurrir a los loafers, a los tenis de tela o a zapatos más frescos, pero que no lleguen al extremo de las sandalias, porque definitivamente nadie quiere ver los dedos de tus pies cuando están trabajando.
Materiales o colores donde el sudor sea más evidente
Las manchas de sudor no son y nunca van a ser atractivas, es por esto que debes considerar que algunos materiales y colores no son ideales cuando hace calor. La seda, por ejemplo, se puede manchar fácilmente con el sudor, mientras que hay colores como el azul claro donde las manchas se pueden ver muy marcadas.
Una buena forma de combatir esto es con un buen antitranspirante o eligiendo el material correcto.
No vestir por capas
Lo que sucede es que la temperatura al aire libre no siempre va a ser la misma que en el interior, muchos lugares de trabajo tienen aire acondicionado y eso hace que puedas pasar frío si no estás preparado.
Es buena idea que lleves una sobrecamisa, un saco o una chaqueta ligera, tomando en cuenta que tu look se debe ver bien y completo incluso si cuando te quites esa capa externa.
Fuente. gq.com