Jueves, 3 de agosto del 2023
La cuenta regresiva para las olimpiadas de París ha comenzado. Y aunque los deportes nos emocionan, para los aficionados a la horología, los relojes de los Juegos Olímpicos son la verdadera razón por la que esperamos con ansias el pistolazo inaugural.
Y dado que el tiempo es crucial en una competencia de los Juegos Olímpicos, tener un cronometrador a la altura es esencial. Por lo que el evento suele recurrir a las mejores casas relojeras para encargarse de seguir cada milésima de segundo en las competencias. Por supuesto, estas alianzas han rendido frutos más allá del podio, dando lugar a los mejores relojes de los Juegos Olímpicos.
En GQ sabemos que aunque los enfrentamientos de natación y atletismo, entre otros, te apasionan, los relojes son tu única y verdadera obsesión, por lo que hemos seleccionado recuperado las piezas que se lanzaron para conmemorar las últimas ediciones de los Juegos Olímpicos —al menos durante las dos últimas décadas—.
El Seamaster Diver 300M para París 2024
Hace apenas unos días, Omega sacudió nuestro mundo cuando lanzó el Omega Seamaster Diver 300M para París 2024, un cronógrafo fabricado con cero inoxidable y oro Moonshine de 18 quilates, cuyo diseño es simplemente impecable. Cada detalle ha sido cuidado, desde la manecilla con la icónica silueta de la flama que da vida a la antorcha, hasta la inscripción en el fondo de la caja, pasando por las texturas de la caja y el bisel, así como el brazalete de eslabones.
El Seamaster Diver 300M para Tokyo 2020
A pesar de lo atropellada que fue esta edición de los Juegos Olímpicos, Tokyo 2020 contó con un reloj muy especial, encargado de celebrar la llagada del evento. Para la ocasión, Omega tomó como base su Seamaster Diver 300M y creó una pieza digna del podio: un reloj fabricado en acero noble, con bisel de cerámica azul y una esfera blanca esmaltada. Como es costumbre, el emblema de los Juegos fue transferido al fondo de la caja translúcida que deja ver el movimiento Co-Axial Master Chronometer calibre 8800.
Los Seamaster para Río 2016
Los Juegos Olímpicos de Río 2016 han sido de los más alegres que puedo recordar, lo cual no es sorpresa, pues no es fortuito que el país sudamericano albergue el carnaval más grande del mundo. Para el evento, Omega lo dio todo, reinventando su Seamaster, en tres versiones totalmente distintas: el Seamaster Diver 300M “Rio 2016” con un bisel de cerámica, los números en los colores de los aros olímpicos y una esfera inspirado en Copacabana; el Bullhead “Rio 2016” de forma única con correa azul enmarcada por pespuntes en rojo, amarillo, azul y verde; y el Mark II “Rio 2016” de color negro con sub esferas de oro, plata y bronce —posiblemente este es mi favorito de todos los relojes de los Juegos Olímpicos—.
El Seamaster Aqua Terra para Londres 2012
2012 no fue la primera vez que Londres recibía el pebetero olímpico. Luego de que en 1948 la ciudad británica fuera sede de los Juegos, en 2012 Omega se impuso la misión de crear un reloj que conmemorara las dos ediciones tan memorables, dando lugar a un reloj atemporal. Este modelo de acero de 34 mm presenta una bella una esfera azul, decorada con el inconfundible motivo Teak Concept, e incluye una ventana de fecha a las 3. Puede parecer un reloj bastante discreto, pero en la parte trasera de la caja lleva grabado el emblema de los Juegos.
El Seamaster para Beijing 2008
Con un elegante diseño, Omega celebró los Juegos Olímpicos de 2008. Para el evento se creó un reloj de acero noble con esfera negra y sub esferas blancas que crean el escenario perfecto para develar el logo de colores de los Juegos.
Tissot para Atenas 2004
La corona olímpica de laurel es un emblema proveniente de la historia de los antiguos Juegos Olímpicos, este elemento fue rescatado por Tissot para el reloj que conmemoró las olimpiadas de Atenas 2004. Su aspecto vintage lo hace parecer como sacado de otra época, por lo que es una pieza irresistible para muchos coleccionistas, aunque conseguirla sería una odisea.
Fuente. gq.com