Viernes, 18 de agosto del 2023
Elegir un buen veterinario es uno de los pasos más importantes para el cuidado de tu mascota, pues será la persona a quien le confiarás su salud y bienestar; la tarea se vuelve un poco complicada cuando es la primera vez que adoptas a un animalito de compañía.
1. Busca recomendaciones
Seguramente dentro de tu círculo social habrá personas que tengan perros, gatos u otras mascotas; pregúntales quién es su doctor y trata de indagar sobre los detalles que hicieron que tu conocido lo escogiera.
2. Comprueba su experiencia
¿Ya le echaste el ojo a algún especialista? Bueno, es momento de indagar sobre su trayectoria académica, su experiencia y sus especialidades. Si no hay forma de comprobar esta información, lo mejor es que sigas buscando en otros lugares.
3. Busca un establecimiento cerca de ti
Es importante elegir un buen veterinario que se encuentre cerca de tu casa debido a que en cualquier momento podrías tener una emergencia y el tiempo es crucial para las mascotas en estos casos.
4. Échale un ojo a las instalaciones
Unas buenas instalaciones dicen mucho de un consultorio y de quien lo trabaja, por eso es conveniente que evalúes si la clínica a donde llevarías a tu peludito está limpia y tiene equipo adecuado.
Aunque tenga servicio a domicilio, debes elegir a un buen veterinario al que puedas localizar en algún sitio.
5. Compara precios
Los servicios de salud para las mascotas no suelen ser tan baratos, y menos si tu mejor amigo requiere una atención especializada, aunque tampoco tienes por qué gastarte toda tu quincena en una sola cita.
Antes de inclinarte por algún establecimiento, compara los costos.
Un apoyo a tu bolsillo podrían ser algunas campañas de salud del Gobierno, en las cuales se ofrece esterilización y/o vacunación gratuita.
6. Evalúa la atención a mejor amigo
En este balance de costo/beneficio, debes de tomar en cuenta cómo es la interacción entre el “dogtor” y tu peludito.
Existen especialistas tan comprometidos que no importa si solo vas por una vacuna, revisarán al animalito de la nariz a la punta de la cola para cerciorarse de que todo está en orden con su salud.
Debe de tratar a tu “bendición” con firmeza, pero también con mucho cuidado y respeto.
También debe de formarse una relación de confianza entre él, el peludito y tú, debido a que debe de explicarte claramente y el paciente no debe de sentir miedo durante su revisión.
7. Al elegir a un buen veterinario, considera tener varias opciones
Es bueno tener una segunda opinión, sobre todo cuando tu animal de compañía pasa por una situación complicada de salud.
Esto también podría salvarte de un apuro si es que surge una emergencia y el médico de cabecera que consultas no está en la ciudad o está fuera del horario de servicio.
Contempla clínicas u hospitales con guardias y servicios de 24 horas.
Fuente: UnoTV