Martes, 12 de marzo del 2024
La más grande batalla de todos los tiempos está en casa. No podemos negar que, para muchas familias, es muy complicado lograr que sus pequeños coman de forma más balanceada e incluir en su dieta frutas y vegetales que son una importante fuente de nutrientes.
Este conflicto, que desde nuestra perspectiva se ha agravado debido a la practicidad que representa el consumo de alimentos ultra procesados, tiene algunas maneras de revertirse con la finalidad de enriquecer la dieta de todos en casa, principalmente de los niños, quienes no encuentran el mismo gusto de una fritura condimentada en un vegetal asado y, por tal motivo, deciden rechazarlo.
No cabe duda que la mejor manera de lograr que tus hijos consuman esas magníficas fuentes de vitaminas y minerales es evitar a toda costa que prueben aquellos alimentos considerados chatarra, sin embargo esta solución resulta utópica, ya que vivimos en un mundo tan globalizado en el que prácticamente todos tenemos acceso a todo, que para lograr esta premisa deberías aislar a tu hijo y a toda tu familia.
Pero no debes desanimarte, pues sí existen algunas formas de hacer que tus pequeños se familiaricen con las verduras y, poco a poco, acepten sus variados sabores y texturas. Aquí te dejamos algunos tips y recetas con las que puedes ayudar en la nutrición de tus pequeños.
Consejos para ayudar a que tus hijos consuman más vegetales
Make it fun!
Quizá es el consejo que todas las personas a tu alrededor te han dicho, pero es un hecho que funciona. Añadir creatividad a sus platillos, puede ser una gran manera de hacer que tus hijos coman verduras sin poner tanta resistencia. En distintas culturas como la japonesa, donde se acostumbran las Bento Box, se procura que cada alimento sea atractivo visualmente para los pequeños, por lo que generalmente ponen accesorios como palillos de distintas figuras o cortan los elementos de la comida en originales formas como flores. Si crees que esto va a tomar mucho tiempo de tu día, también puedes hacer cosas más simples como decorar su huevo de las mañanas con vegetales para crear algún animalito o simplemente añadirle ojos a un sándwich.
Escóndelo
Haz este complicado ingrediente uno más de tus habituales recetas. Por ejemplo, si el platillo favorito de tus pequeños para desayunar son los wafles, píntalos de verde añadiendo espinacas, esta valiosa fuente de hierro tiene un sabor muy neutral, sobre todo cuando está cruda, lo que puede ayudar muchísimo a complementar los alimentos cambiándoles muy poco el sabor. También puedes hacerlos naranja si agregas jugo de zanahoria en lugar de leche o incluso si solo la añades rallada. Acompaña estos panecitos con fruta o con ingredientes salados y ellos habrán comido espinacas o zanahorias sin saberlo. Otra forma muy creativa de utilizar la waflera es haciendo tortitas de huevo con, prácticamente, cualquier ingrediente: puedes rallar camote, papa o zanahoria, añadir pedazos de pimiento y cebolla, y tendrán un muy nutritivo desayuno con mucha proteína.
Conviértelo en sopa
Por lo general, lo visual es lo primero que nos hace poner resistencia, por lo que para muchos niños es más sencillo ingerir vegetales a partir de cremas, ya que de esta manera no se alcanzan a ver los elementos saludables en la mezcla. Nuestra recomendación es que pongas en agua hirviendo con sal todos los vegetales que consideres que debe llevar tu sopa cortados de manera uniforme y los dejes máximo cinco minutos. Una vez pasado el tiempo sácalos y llévalos a agua con hielos para evitar la sobre cocción. Ponlos en una licuadora con algún producto lácteo o, si lo prefieres, puedes agregar una papa cocida, que si bien no generará la misma textura tersa que la crema, puede hacer más apetecible a la vista esta sopa, gracias a su almidón. Sazona a tu gusto y acompáñala con crotones, eso le encantará a tus hijos.
Agrégalo a su comida favorita
Amamos los carbohidratos, eso no lo podemos negar, pero si vamos a consumirlos, podemos agregar algún toque más nutritivo complementando con verduras. Si tus hijos aman la pizza, esta es una gran forma de añadir vegetales a su dieta, ya que puedes hacer tu salsa de tomate súper vitamínica incorporando algunos ingredientes extra como zanahoria. Otra forma de mejorar este platillo tan rico y divertido es intercambiar la masa tradicional con alguna base de coliflor, ellos no lo sabrán. Como topping puedes añadir algunos vegetales más y esconderlos en el queso. Ahora que si lo suyo son las pastas, también puedes hacer la salsa a partir de vegetales o añadir calabazas, champiñones o más ingredientes al platillo final.
Apóyate de sus personajes favoritos
Gracias a distintas películas hemos conocido algunos platillos que generan interés en los pequeños, tal es el caso de ‘Ratatouille’, el filme animado que nos presenta una de las recetas francesas más destacadas y, netamente, protagonizada por verduras. Preparar esta típica charola que incluye calabaza, tomate, cebolla y berenjena es una gran opción para emocionar a tu hijo a probar cosas diferentes. Así mismo puedes hacer el Gumbo de Tiana, la protagonista de la película ‘The Princess and the Frog’. Este platillo originario de Nueva Orleans incluye pimiento, cebolla y apio, y esto puede ser un platillo muy reconfortante para tu pequeño evitando los ingredientes que le aporten el gusto picante.
Fuente: hola.com