Nava Mau, la actriz mexicana de Bebé Reno: “Lo que necesitamos son oportunidades y apoyo. No puedes tener lo uno sin lo otro”

 Nava Mau, la actriz mexicana de Bebé Reno: “Lo que necesitamos son oportunidades y apoyo. No puedes tener lo uno sin lo otro”

Nava Mau nos demuestra que el éxito te alcanza, pero también se trabaja. Aquí una conversación íntima sobre México, las princesas y la multiculturalidad con la actriz de Baby Reindeer.

En el frenético mundo de Hollywood, emergen voces que no solo cuentan historias, sino que también redefinen las narrativas. Una de esas voces es la de Nava Mau (32), actriz mexicana-estadounidense, directora y activista, cuya carrera meteórica y talento innato han capturado la atención del público y la crítica por igual.

Nava Mau ha demostrado su capacidad para dar vida a personajes complejos y un profundo compromiso con la representación del colectivo LGBTIQA+. En el proceso, se ha convertido en un faro de cambio y en el camino se ha transformado en una figura inspiradora. Con una espontaneidad que desarma y una pasión palpable por su oficio, ella nos invita a conocer más de cerca las experiencias que han moldeado su carrera y su vida, recordándonos que la verdadera diversidad no solo se celebra, también se vive.

Lo primero: Así se siente México

Nava Mau nos recibe con un “¡hola!”, que ilumina por completo la entrevista que vengo esperando desde hace días. La actriz, productora y directora, nos deja en claro que esta conversación será en español, y que este diálogo vale la pena iniciarlo con un recuerdo de México: “Haber nacido en la Ciudad de México, el haber vivido ahí los primeros años de mi vida me dio un gran fundamento hacia lo colectivo. Creo que veo al mundo por medio de ese marco de referencia. Al llegar a los Estados Unidos desarrollé mi individualidad, pero conocí a gente de diversas culturas y eso me permitió entender más al mundo”. Nava piensa bien cada respuesta, se toma unos segundos para hablar con certeza, timidez mezclada con esperanza.

“Al mudarnos a Estados Unidos, mi casa siguió siendo muy mexicana. Mi mamá, que es estadounidense, solo hablaba inglés; el español lo hablaba con mi papá. Siempre ha sido parte de mi vida hablar inglés y español todos los días. Ahora quiero mantener el francés que aprendí en la universidad y cuando viví en Francia. Y estoy aprendiendo portugués”. Vivir en París y en la Isla de la Reunión –territorio de ultramar francés en África–, han sido experiencias que le han dado ese saber moverse aquí y en todas partes.

Antes de Bebé Reno (2024), un éxito de Netflix, esa misma pluralidad le sirvió para sumar otras capacidades a su recorrido: Además de identificarse como “cultural worker”, fue directora del cortometraje Waking Hour (2019) y productora del documental Disclosure: Ser trans en Hollywood (2020), también de Netflix.

Pero tal parece que ese talento siempre estuvo ahí: “Me acuerdo de una vez que fui a casa de mi tío, era una reunión familiar, estaban todos. No sé por qué, pero decidí que quería darles un show con la canción ‘Y yo sigo aquí’ de Paulina Rubio. Tendría siete años y así siempre fue con todo. Me ponía una cobija en la cabeza, una toalla, una playera, como si fuera mi pelo… Y con mis hermanas hacíamos un espectáculo de Selena, de Yuri, las Spice Girls”.

Más adelante, en sus años escolares montaría el espectáculo Cats, demostrando que solo había que comprometerse con una idea para verla realizada. En entrevistas anteriores ha confirmado que cree fielmente en el poder de la manifestación: “Yo fui a Londres a ser parte de algo muy especial, sumamente personal, ahora la gente ve la serie y hay mucha emoción y diálogos al respecto. Eso es un logro adicional, una bendición. Que el arte tenga su propio camino”.

Lo segundo: Nava Mau (la mujer, la actriz, la princesa)

El personaje de Teri, una mujer “translatina” –según su propia definición– vulnerable, pero también profesional, es una representación bien pensada. Teri tiene objetivos de vida concretos y una fortaleza ante la indecisión de Donny, interpretado por Richard Gadd. Esta vez una serie nos permitió ver otra realidad trans, una en donde Teri logra salir de una relación que no era para ella.

Nava Mau tiene un agudo sentido del humor, por lo que tuvimos que preguntarle si le gustaría hacer comedia en el futuro: “Sí, estaría bien hacer más comedias. No estoy buscando el drama en la actualidad. Teri, y el corto que dirigí, fueron momentos muy intensos y se llevaron mucho de mí. Tuve que destapar muchas de mis heridas personales para esos dos papeles. También tuve que abrirme para entender el terreno emocional de lo que Richard [director y actor de la serie] había escrito”. No obstante, este proceso dejó sus frutos: “Fue muy demandante y gratificante, todo al mismo tiempo. Era lo que tenía que hacer, y lo hice”, señala con la voz calma.

Ahora, en medio del éxito en streaming, hay algunos roles que también la seducen y a los que quiere dar vida: “No sé por qué, pero me gustaría interpretar a una princesa o una reina. De algún reino lejano… (risas) No tiene que ser de la vida real, puede ser en la fantasía o puede ser un sitio histórico. Me gustaría explorar esas dinámicas de la política real”. Quizás eso tenga que ver con las mujeres que más la han marcado, una colección de reinas de su propio mundo: “Admiro mucho a la escritora Octavia E. Butler; claro que amo a Selena (ha sido una gran influencia en mi vida), pero también a la activista Bambi Salcedo de la Coalición Translatina, a quien conocí incluso antes de aceptar mi identidad como mujer. Ella ha sido una madrina para mí”.

Lo último: Una carta para el presente y otra para el futuro

Entre el mundo real lleno de noticias desalentadoras y las fantasías de Hollywood, puede ser fácil perderse. ¿Cómo hace Nava Mau para mantener el balance?: “De momento, sigo buscándolo (risas), creo que tuve la suerte de vivir una vida mucho más callada, más tranquila, antes del éxito de la serie. Me gusta irme en mis caminatas, bailar, cuidar de mi cuerpo y estar en contacto con la naturaleza, esto me ayuda con mis reservas de energía”.

Su piel lozana es la prueba. Nava Mau, sin una gota de maquillaje, me ve directo a los ojos. Luce lista para entrar a cualquier set. ¿Cómo es tu rutina de belleza?: “Es la genética mexicana (risas). Tengo piel seca y me humecto el rostro dos veces al día. Mis dermatólogos me dijeron que entre menos agregue cosas a mi piel, mejor, soy muy gentle con ella”.

Y en cuanto al futuro, a esa duda que rasca la puerta, ella lo deja en claro: “Nunca le temo al diálogo (…) Hemos llegado tan lejos en temas de representación, tantos individuos y organizaciones han luchado por décadas para crear oportunidades y estructuras que rompan con esa dinámica de poder que históricamente ha excluido a personas distintas en la industria del entretenimiento. Al actuar, escribir, dirigir, siempre pienso en el aspecto práctico. Lo que necesitamos son oportunidades y apoyo. No puedes tener lo uno sin lo otro. Necesitamos tener más de eso, de una forma tangible”.

“Me siento muy agradecida por el acompañamiento de mis ancestros y por la esperanza del futuro”, revela Nava Mau justo antes de que alguien toque la puerta. En esos últimos segundos, suelta con el mismo tono calmado del inicio: “Estamos en una época de mucho conflicto, de incertidumbre, pero espero poder transmitir un mensaje de esperanza. He pasado por épocas muy oscuras en mi vida, oprimida por el peso del sufrimiento, y lo que me sacó de ahí fueron otras personas que me demostraron que tenían fe y que, juntos, podemos superarlo todo. Esta es la única forma de seguir hacia adelante”.

Hollywood no para, y ella tampoco.

Fuente: vogue.com