Jueves, 11 de julio del 2024
Ya lo hemos dicho una y mil veces. Hablar de perfumes para hombre en la misma oración que apelamos al buen gusto es un asunto delicado. ¿Qué puede hacer superior a una fragancia frente a otra? ¿Quién es capaz de dictar este tipo de diferencias y estatus? ¿Basta con que alguien lo diga? Puedes decirlo tú, a fin de cuentas. Pero ¿necesita ser estipulado por la gente correcta? ¿Quiénes son ellos? ¿Nuestros expertos?
Bueno… todo se resume a la creación de un juicio propio. Un discernimiento capaz de reconocer nuestros intereses particulares y aceptar el momento que vivimos —tanto a nivel personal como colectivo—. Entonces, con un escozor causado por seguir discutiendo sobre ciertas cualidades ligadas a los buenos modales, la conducta refinada, la educación, el orden, la mesura y la armonía —en general, una pila de ideas anticuadas—, debemos distinguir que el buen gusto en realidad no tiene reglas preestablecidas. De hecho, se va construyendo con el tiempo y se reconoce de manera inmediata en todas aquellas personas que lo demuestran con naturalidad. Es, más bien, un consenso de placer, belleza y genialidad en cada época.
Resumiendo: el buen gusto no necesariamente tiene que ver con la tradición ni con imágenes ultraconservadoras del comportamiento humano. Al contrario, es una herramienta que nos permite ser conscientes frente a lo que está de moda; específicamente en esta década, aceptando que hoy se aceptan distintos tipos de belleza.
Aclarado esto, en esta ocasión hemos recopilado los mejores perfumes que caracterizan a hombres con buen gusto; propuestas olfativas propias de nuestro tiempo que juegan con la exclusividad, ingredientes de altísima calidad, tendencias que nos hablan del presente y futuro en el cosmos del lujo. Fragancias que, además de todo, son perfectas para días de cielos nublados y lluvia, gracias a sus estilos cálidos, reconfortantes, misteriosos, sensuales y hasta intelectuales. Toma nota.
BVLGARI Man Rain Essence EDP
Está implícito en el nombre; éste es un aroma excelente para cualquier momento, pero definitivamente apropiado cuando llueve. Tiene un toque fresco para todos aquellos hombres que amen un aroma limpio, pero al mismo tiempo tiene algo sensualmente masculino que le hace el mejor aroma para un día lluvioso. El poder de la lluvia capturado en una esencia.
Notas: té verde, naranja, nenúfar blanco, almizcle, madera de gaiac y ámbar.
Bleu de Chanel
Aunque ésta es una fragancia que normalmente usaríamos por la noche, cuando llueve funciona a la perfección. Un nuevo clásico que siempre resalta nuestra sensual hombría y un poder seductor que nos dirige a los mejores looks de la temporada. Visualízate: tú con un impecable traje semiformal, abrigo, botas, bufanda y un aroma intenso que llamará la atención de quien tú desees.
Notas: toronja, limón, menta, pimienta rosa, jengibre, nuez moscada, jazmín, Iso E Super, incienso, vetiver, cedro, sándalo, pachulí, ládano y almizcle blanco.
Prada L'Homme EDT
Un mix de ámbar —que aportan ese sello masculino que estamos buscando para estos días de lluvia— y notas florales que resaltan en condiciones húmedas. Perfecto para llevar durante el día para la oficina o alguna comida relajada, así como para usar en la noche durante una cena elegante o un café con esa persona especial. De los mejores perfumes para hombre.
Notas: neroli, pimienta negra, cardamomo, semillas de zanahoria, iris, violeta, geranio, yerba mate, ámbar, cedro, sándalo y pachulí.
Dior Fahrenheit
Un aroma para días lluviosos que resulta ligero y fresco. Un perfume clásico para hombres que ha existido durante décadas, perfecto para cualquier sujeto que quiera sentirse seguro y poderoso. Se dice que éste es uno de los mejores perfumes de larga duración, lo que aumenta su deseo ¿no es así? Lo mejor es que va bien con todas las edades y estilos.
Notas: flor del moscadero, lavanda, cedro, manzanilla, mandarina, flor del espino, bergamota, limón, hojas de violeta, nuez moscada, cedro, sándalo, clavel, madreselva, jazmín, lirio de los valles, cuero, vetiver, almizcle, ámbar, pachulí y haba tonka.
Fuente. gq.com