Jueves, 25 de julio del 2024
¿Qué se necesita para tener relaciones duraderas y felices? Si quieres una respuesta cursi, podemos decir que se necesita amor, pero, si quieres una respuesta más completa y basada en la psicología, entonces todo se vuelve un poco más profundo y complejo.
La atracción inicial y la química de la primera etapa de la relación no es garantía de que esta va a ser duradera, estable, fuerte y feliz. Lo que pasa es que las personas y la vida va cambiando con el tiempo, las necesidades pueden cambiar, surgen nuevas, aparecen los problemas o incluso hay momentos en los que se puede sentir que la conexión con la pareja ya no es tan fuerte, y por eso los expertos dicen que el secreto para tener buenas relaciones está en no descuidarse y en no dejar de trabajar en ellas.
La psicología nos dice que es importante considerar que hay factores que pueden mejorar o destruir una relación. Los hábitos de pareja, la división de las responsabilidades, las demostraciones de afecto y la comunicación son puntos clave que se necesitan para tener vínculos más fuertes y para poder sobrevivir a los problemas, obstáculos y dificultades.
De acuerdo con el psicólogo Mark Travers y en su artículo para Psychology Today, la base de las buenas relaciones debe estar en unos cuantos factores que ayudan a construir parejas resilientes y comprometidas con su felicidad y bienestar,
Para tener relaciones duraderas y felices: 3 factores esenciales, según la psicología
Confianza mutua y balance
De acuerdo con Travers, el primer paso es el de construir una dinámica de balance, Esto quiere decir que se entiende que no siempre se va a estar al mismo nivel que la pareja, pero que, cuando uno tenga problemas o dificultades, el otro va a estar ahí para ser un punto de apoyo y para ayudar a salir adelante. Se trata también de tener acuerdos mutuos, de saber negociar y de encontrar puntos medios en los que todos puedan tener lo que necesitan, haciendo algunos sacrificios cuando se requiera.
Por otro lado, una relación no puede sobrevivir si no hay confianza entre la pareja, que debe ser de los dos lados y debe hacer que todos los involucrados se sientan seguros, lo suficiente para poder mostrarse vulnerables o para poder expresar lo que sienten y pedir lo que quieren.
Trabajar en las identidades individuales
Es importante entender que tu pareja no eres tú, y que tu identidad no se reduce a tener una relación o a la persona que eres dentro de la relación.
Tienes que saber quién eres cuando estás solo, qué es lo que quieres, qué te interesa, sin buscar que la otra persona te haga sentir completo, y sin pensar que solo puedes ser feliz si estás en una relación. “Las relaciones duraderas prosperan cuando los socios se unen como individuos completos e independientes para crear algo más grande que ellos mismos. En tales relaciones, las personas no permanecen juntas por desesperación, inseguridad, miedo a la soledad o simplemente porque todos los demás lo hacen, sino porque realmente quieren estar juntas”, dice el experto.
Al final, se trata de querer a una persona, no de necesitarla para cubrir algún vacío personal o para no sentirte solo.
Resolución consciente de conflictos
Todas las relaciones, las buenas, las mediocres y las malas, pueden llegar a tener problemas, pero la diferencias entre las duraderas y felices, y las que no lo son, está en lo que hacen con los problemas cuando aparecen.
El experto dice que se trata de estar presentes, de no juzgar y de buscar soluciones en conjunto, desde un punto mucho más amable y respetuoso hacia uno mismo y hacia la pareja. Se trata de no ser reactivos o explosivos, sino de pensar, de escuchar y de comunicar para que los problemas se puedan resolver de mejor forma y desde la raíz, para que la situación no escale y para evitar caer en el mismo problema una y otra vez.
La buena comunicación debe convertirse en un hábito.
Fuente. gq.com