Martes, 13 de agosto del 2024
¡Tu rutina de la mañana cambiará completamente!
¿Cómo ser morning person? ¡Aquí te daré la respuesta!
Si estás leyendo esta nota es porque seguramente las mañanas son un momento difícil para ti, te cuesta levantarte temprano y no logras tener un momento productivo antes de las 12 del día. Sí, te entiendo, en algún momento de mi vida también fue una situación complicada, no me gustaba salir de la cama antes de las 10 de la mañana y eso marcaba una rutina de vida que no era sostenible en un mundo real.
Está comprobado que nuestro momento de mayor productividad se da de las 10 de la mañana a las 2 de la tarde, fue por ello que decidí establecer nuevos hábitos para aprovechar al máximo mi día. Te compartiré mi experiencia acerca de cómo logré ser morning person y los mejores tips para lograrlo fácilmente.
Cómo ser morning person
El camino hacia transformar tu rutina diaria requiere ser constante para que puedas adquirir nuevos hábitos, estos son algunos de ellos.
Empieza poco a poco
Si de un día a otro intentas despertar 4 o 5 horas antes, definitivamente no lo vas a lograr, el cambio será tan drástico que en vez de sentirte aliviada o con más energía para empezar tu día, tendrás sueño y cansancio. La manera en que yo pude lograrlo fue comenzando a levantarme y acostarme media hora antes cada día, fue un proceso de una semana aproximadamente, pero así fue mucho más ligero para mí adaptarme a un nuevo horario sin sentirme abrumado.
Establece una rutina de sueño
La noche anterior es mucho más importante incluso que la mañana del día siguiente, pues determina qué tan efectivas serán tus horas de descanso, así que es primordial que logres construir una rutina de sueño para que puedas despertar llena de energía. Lo mejor es que una hora antes de dormir, puedas comenzar a hacer pausadamente tu rutina, lejos de las pantallas y que, en medida de lo posible, evites exponerte al ruido.
No comas nada después de las 8 pm
Si quieres obtener un buen descanso, lo mejor es que puedas hacer tu última comida, a más tardar a las 8 de la noche, de esta manera tu cuerpo hará digestión antes de que vayas a dormir y puedas sentirte ligera.
Si sientes insomnio, ten un libro a la mano
Algo a lo que te enfrentarás en los primeros días de este cambio de rutina será al insomnio. Cuando esto suceda, lo mejor es que no te estreses por conciliar el sueño y que tengas un buen libro a la mano para que puedas relajarte.
Está comprobado que leer antes de dormir, permite que tu cuerpo tenga un mejor descanso, mi recomendación es que elijas un libro de poesía o lecturas cortas, evita los best sellers o algún texto que pueda activar demasiado tu mente.
Que tu alarma sea suave
Nada más incómodo que tener que levantarte después de que un sonido estruendoso interrumpa tu sueño de manera abrupta. Cuando estás en el proceso de adquirir nuevos hábitos, es importante cuidar que tomen su curso de una manera calmada, así que lo mejor es elegir una alarma que sea suave, lo suficiente para despertarte, pero que realmente puedas escucharla.
Establece una rutina para iniciar tu día
Una de las cosas que puede motivarte a despertarte más temprano es dedicar tiempo a actividades que usualmente no puedes realizar porque comienzas el día muy tarde. No necesariamente tiene que ser algo que involucre ejercicio, puedes dedicar tiempo a otros hobbies antes de ir a trabajar.
Es importante que tomes este cambio no como una obligación, sino como una manera de darte un tiempo para aprovechar al máximo las mañanas y tener unas tardes más relajadas.
Fuente: glamour.mx