Cómo prevenir y protegerse del Gaslighting en el trabajo

Jueves, 5 de septiembre del 2024

El gaslighting laboral es muy similar al gaslighting que sucede en tu vida personal y en las relaciones de pareja, de amistad o familiares, pero este tiene el elemento extra de que puede arruinar tu experiencia en el trabajo, afectar tu seguridad, tu desempeño y tus posibilidades de lograr tus objetivos y alcanzar el éxito en tus proyectos.



Cuando sufres gaslighting, entonces puedes llegar a dejar de confiar en ti mismo, en tus instintos, tus creencias y tus conocimientos. Cuando hay gaslighting, el ambiente de trabajo se vuelve más y más tóxico y agotador, y la manipulación psicológica, ya sea leve o más evidente, no solo afecta negativamente el bienestar, también puede hacer que no puedas tener un crecimiento o que no puedas hacer bien tu trabajo (en parte porque nunca sabes si estás haciendo lo correcto).


“El gaslighting en el trabajo es cuando un compañero de trabajo o jefe (el gaslighter) te manipula hasta el punto de que cuestionas tu propia cordura, memoria o percepciones. El gaslighter puede hacerlo negando eventos pasados, restando importancia a tus emociones o contando eventos para que cargues con la culpa”, explica Better up.

 

Esto puede incluir desde un jefe que nunca te defiende y que siempre te hace sentir que estás exagerando, hasta un compañero que te manipula para que tomes parte de sus responsabilidades, o que se cuelga tus logros o te culpa de sus errores.


¿Cómo identificar a un Gaslighter en el trabajo?


 

Una persona Gaslighter es una persona que siempre busca la manipulación, y Better Up dice que hay algunas cualidades de las que hay que estar atentos:


• Una personalidad altamente manipuladora
• Baja sensación de autoestima
• Inseguridades, disimuladas al señalar constantemente los defectos de los demás
• Control hasta el punto de no responder bien cuando no tienen poder
• Tendencias narcisistas (a veces vistas en el trabajo como liderazgo tóxico)
• Esto puede manifestarse en forma de críticas negativas constantes, en esfuerzos por menospreciar o desestimar tus emociones o tu percepción de ciertas cosas, en ser excluido de reuniones o juntas en las que deberías estar o incluso en una falta de retroalimentación sobre tu trabajo, o incluso sabotaje de tus esfuerzos por hacer tu trabajo correctamente o por señalar un problema que estás experimentando.

 

• Qué hacer para protegerte del Gaslighting laboral


• Hay que poner límites claros
• Para protegerte de un Gaslighter, es importante que sepas cuáles son tus límites, que logres establecerlos claramente y que los comuniques para que las personas que necesitan conocerlos estén enteradas. Esos límites pueden ayudarte a reducir el contexto con esa persona que estopa cayendo en comportamientos de manipulación, a proteger tu bienestar y salud mental, e incluso a no caer en el People Pleasing o en el burnout.
• Busca tener evidencias
• Tener un registro de todo es importante, ya que los gaslighters suelen decir cosas como “yo no dije eso” o “entendiste mal” para justificar sus comportamientos, para hacer que dudes de ti mismo, que sientas que cometiste errores o para jugar con tu percepción de las cosas.
• Cuando tienes las cosas por escrito, cuando guardas los mensajes y los correos, entonces puedes usar esto como evidencia para defender tu postura, tu trabajo y tus acciones, y para dejar a un gaslighter sin herramientas para seguir manipulando.
• Prepara tus argumentos y defiéndelos
• Una persona que hace gaslighting va a intentar destruir todos tus argumentos durante una conversación o discusión, e incluso puede intentar desviar el tema y desestimar lo que estás diciendo, por eso también hay que hacer un poco de trabajo previo antes de interactuar con ellos.
• Debes identificar cuáles son los puntos importantes de los que quieres hablar, cuáles son tus argumentos y tu postura, y debes estar listo para defenderlos y mantenerte firme, incluso cuando la otra persona hace un esfuerzo por hacerte creer que estás equivocado. No se trata de ser necio o de aferrarte a cosas que no están bien, sino de pelear por lo que sabes que sí lo está.
• Busca el apoyo y la retroalimentación de personas de confianza
• Si sospechas que toda la mala retroalimentación que estás recibiendo, o que la falta de ella, podría ser una señal de gaslighting, entonces lo que puedes hacer es acercarte a otras personas en las que sepas que puedas confiar, para obtener su opinión, su retroalimentación o incluso sus consejos para poder lidiar mejor con la situación.
• Trabaja en tu confianza
• Los gaslighters se aprovechan de las debilidades o inseguridades de los demás para hacerlos sentir todavía más inseguros y llenos de dudas sobre su trabajo, su desempeño y sus experiencias, así que una buena forma de protegerte es buscando la manera de trabajar en tu autoestima, ya sea con una terapia, con un diario de gratitud, celebrando tus pequeños logros o realizando actividades que permitan que te sientas más fuerte mentalmente y más seguro de ti mismo.
• Escala la situación si es necesario
• No se trata de hacer las cosas más grandes, sino de que, cuando el gaslighting viene de un compañero de trabajo, puedas comunicar la situación a tu jefe, supervisor o a una persona que pueda ayudarte a solucionar el problema y a evitar que empeore o que siga sucediendo.
• Es importante alzar la voz y pedir ayuda cuando te enfrentas con una persona que usa la manipulación para aprovecharse de otros y para generar un mal ambiente de trabajo.

 

 

 

Fuente. gq.com

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