Jueves, 12 de septiembre del 2024
A veces, en una relación, darse un break no es señal de debilidad, sino de sabiduría. Es tomarse un respiro para recalibrar, para reencontrarse con uno mismo y, al final, regresar más fuertes y con una nueva perspectiva. Es como pausar una canción que amas, solo para apreciarla mejor cuando vuelve a sonar.
Darse un break no significa que no haya amor, significa que hay conciencia, pero, ¿es realmente una pausa la solución mágica para reavivar la chispa en la relación o esconde una realidad más triste?
¿Qué es exactamente darse un break?
El concepto de “darse un break”, consiste literalmente en hacer una pausa en la relación. Se trata de tomar distancia para reevaluar los sentimientos. Este tiempo de reflexión, si se maneja adecuadamente, puede ayudar a salvar la relación.
Es una separación temporal que permite a ambos reflexionar sobre la solidez de los sentimientos, como explica Geneviève Djenati, terapeuta de pareja, entrevistada por Santé Magazine. Sin embargo, advierte que: “Mientras cada uno siga pensando que la culpa es del otro, no saldrán adelante”. El objetivo es cuestionarse a uno mismo, pensar en lo que se espera del otro y en lo que se puede mejorar en la relación.
¿Cómo organizar un break con éxito?
Si la idea de una pausa te atrae, hay reglas que seguir. Primero, la duración: un mes, dos meses, tres meses, eso lo deciden ustedes. Cada pareja es única, pero si la pausa se alarga demasiado, tal vez deban preguntarse si no se trata de una ruptura encubierta. Para evitar un caos, es crucial acordar algunos parámetros antes de separarse. ¿Está permitido ver a otras personas? ¿Seguirán en contacto? Estas preguntas, aunque parezcan triviales, determinarán el éxito o el fracaso del break.
No olvides que esto no es solo para evitar las discusiones. Como dice Christian Richomme, psicoanalista entrevistado por Vogue: “Los desacuerdos recurrentes o los conflictos no resueltos pueden generar una atmósfera de tensión continua. Cuando los mismos problemas vuelven una y otra vez sin solución, puede ser una señal de que los miembros de la pareja necesitan tiempo para reflexionar individualmente y encontrar soluciones”. El break debe ser una oportunidad para hacer un inventario de lo que no funciona, reflexionar sobre lo que esperas de tu pareja y los esfuerzos que estás dispuesto a hacer para mejorar.
¿Por qué darse un break?
Hay muchas razones para hacer una pausa. ¿Necesita reflexionar antes de comprometerse más seriamente? ¿Se repiten discusiones infructuosas que agotan? ¿Otros planes? ¿O simplemente se siente asfixiado? En algunos casos, una ruptura puede ayudar a reavivar la pasión y recuperar la despreocupación de los primeros días.
Las razones para hacer un break son variadas. ¿Necesitas reflexionar antes de un compromiso más serio? ¿Sufres por la repetición de disputas sin sentido? ¿Tienen proyectos divergentes? O quizás, simplemente, hay un sentimiento de asfixia. En algunos casos, una pausa puede ayudar a reavivar la pasión y a recuperar la sensación despreocupada de los primeros días.
“Cuando uno o ambos miembros de la pareja se sienten emocionalmente agotados o sobrecargados por la relación, puede ser una señal de que necesitan distanciarse para descansar y recargar energías”, considera Christian Richomme. Un break también ofrece la oportunidad de reconectarse consigo mismo y regresar a la relación con más claridad y serenidad.
¿Cuándo un break es arriesgado?
Sin embargo, no hay que engañarse. Para algunos expertos, darse un break no siempre es la mejor solución para reconectar en tu relación. El sexólogo Patrick Papazian, entrevistado por LCI, advierte: “Un break es simplemente el principio del fin de una relación”. Según él, “a menudo es una forma amable de hacerle entender al otro que la motivación ya no está, que la relación va mal y que, aunque a veces el fuego reaparece… la pausa no suele ser la mejor manera de retomar el rumbo”.
En otras palabras, si tomas un descanso para evitar enfrentar problemas más profundos, como la falta de comunicación o intimidad, esto podría significar el final. Si bien la comunicación es esencial en cualquier relación, un break podría empeorar la situación. “La falta de comunicación rara vez lleva a una mejor comunicación”, insiste Patrick Papazian. Si la relación ya sufre por falta de diálogo, la pausa podría hacer más evidente este problema. Sin embargo, si te sientes abrumado, una corta distancia puede ser beneficiosa.
Entonces, ¿darse un break es mala idea?
Al final, todo depende de la razón por la que consideras darte un break. Si es para evitar la asfixia o para reflexionar sobre diferencias menores, puede ayudarte a reconectarte contigo mismo y, con suerte, con tu pareja. Pero si usas el break como una excusa para escapar de problemas más profundos, es probable que termine en una ruptura definitiva. Por lo tanto, antes de hacerlo, tómate el tiempo para hablarlo con tu pareja. Porque, aunque esta pausa podría reavivar la chispa, también podría apagar la última llama.
Fuente. gq.com