Lunes, 14 de octubre del 2024
Todo el mundo está buscando la felicidad y las claves para que sea duradera y para poder mantenerla a lo largo de la vida, incluso cuando hay dificultades, estrés o momentos complicados en el trabajo o en la vida personal.
La felicidad es un tema tan importante, que incluso muchos psicólogos y científicos han dedicado sus vidas y carreras a entenderlas, para poder determinar qué es lo que realmente ayuda a construirla y qué es lo que podemos hacer todos los días para aumentarla un poco más.
Los estudios que se han hecho al respecto dicen que cosas como tener buenos amigos, practicar la gratitud y ser generosos nos puede ayudar a ser un poco más felices, o mucho, pero un punto que también es muy importante es el de entender que hay diferentes tipos de felicidad y que, de ellos, solo hay un tipo que es realmente duradero.
¿Cuáles son los dos tipos de felicidad?
La psicóloga Emma Seppälä Ph.D. escribió en Psychology Today que existen dos tipos de felicidad, la hedónica y la eudaimónica.
La felicidad hedónica se refiere a “los placeres de los sentidos”. Es una felicidad divertida que podemos experimentar con cosas como comer lo que nos gusta, con el sexo, con el dinero, ver una buena película y con hacer compras, pero, de acuerdo con la experta, esta es muy corta, se termina rápida y siempre nos deja con ganas de más. Más que felicidad, se trata de placer y de esa sensación de bienestar que nos dan las cosas, pero es similar lo que pasa cuando comemos azúcar, donde hay un rush de energía, que baja rápidamente y no dura.
Del otro lado está la felicidad eudaimónica, que es la que se obtiene cuando hacemos cosas como ayudar a los demás, cuando encontramos el significado y el propósito de nuestras vidas, y esa es la más duradera.
“La felicidad eudaimónica desplaza el foco del placer personal hacia algo más grande: la conexión, el servicio y un sentido de propósito. Este tipo de felicidad nos nutre y contribuye a una sensación duradera de satisfacción”, escribe la experta.
¿Cómo construir la felicidad duradera?
Practicar la generosidad con los demás
“Dar a los demás puede incluso aumentar el bienestar más allá del que experimentamos cuando gastamos dinero en nosotros mismos”, dice Seppälä.
Ser generoso no significa dar grandes cantidades de dinero o no pensar nunca en tí, se puede ver cómo comprarle un café a un compañero de trabajo que lo necesita, brindar tu ayuda a tus amigos o compartir tu tiempo con una persona que necesita ser escuchada.
Busca un balance
Es importante que no descuides tus necesidades, tus objetivos y tus metas personales, ya que todo eso te ayuda a encontrar tu propósito y a trabajar para cumplirlo. Así que la recomendación es que encuentres un balance entre ser generoso y pensar en los demás, y pensar en ti mismo y en tus necesidades. Practica el cuidado personal, aprende a poner límites, cuida tu salud mental y trabaja en ti mismo, sin perder de vista a los demás.
Celebra tus logros
De acuerdo con Better Help, celebrar los logros, incluso si son cosas muy pequeñas, es una de las claves para tener una felicidad más duradera, ya que esto ayuda a controlar la negatividad, mejora la manera en la que te hablas a ti mismo y ayuda a que te trates mejor cuando cometes errores y en el proceso de llegar a tu meta.
Practica el Mindfulness y la gratitud
Better Help dice que el Mindfulness funciona y ayuda a aumentar la felicidad debido a que nos enseña a estar presentes en el momento, a dejar ir el pasado y a no sentir ansiedad por lo que pueda suceder en el futuro. Y hay muchas formas de practicarlo, ya sea con la meditación, con una rutina de cuidado personal, realizando actividades relajantes y tomando tiempo para desconectarte.
Hacer prácticas de gratitud también puede aumentar la felicidad porque hace que te enfoques en las cosas positivas, en lo que tienes y en lo que te gusta de tu vida, en lugar de poner la atención en lo negativo o en lo que crees que te falta.
Trabaja en tus relaciones
La Universidad de Harvard, y muchos expertos más, dice que tener buenos amigos es de las cosas más importantes para la felicidad. Lo importante no es la cantidad, sino asegurarte de que sean cercanos y de tener una conexión profunda , además de que es muy importante pasar tiempo con ellos y convertir esto en una prioridad.
Fuente. gq.com