5 hábitos que te ayuda a prevenir la crisis de los 40, según la ciencia
Viernes, 15 de noviembre del 2024
¿Qué es exactamente la crisis de los 40? Las personas atravesamos por diferentes momentos de crisis a lo largo de la vida. Uno de estos momentos sucede cuando llegamos a los 25 años (la famosa Quarter Life Crisis) y otro más cuando llegamos a los 40, que son en los que pasamos de una etapa de la vida a otra, y cosas como las responsabilidades, las causas de estrés y hasta la salud pueden cambiar.
La crisis de los 40 se conoce también como la crisis de la mediana edad, porque sucede en ese punto de la vida en la que ya no eres un “adulto joven” (sigues siendo joven, pero socialmente hablando, ya estás más cerca de ser un adulto mayor que de la adolescencia). No todas las personas van a experimentar una crisis existencial simplemente por llegar a los 40 años, pero este puede ser un punto en el que se empieza a reflexionar y a cuestionar muchas cosas, y eso se puede sentir abrumador.
Es una crisis interna y que puede afectar tu salud mental y calidad de vida. De acuerdo con Healthline, “hay cierta evidencia de que la felicidad declarada parece disminuir en las personas de entre 40 y 60 años. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) también informan que este grupo de edad tiene las tasas más altas de depresión”.
Entonces, la crisis de los 40 no se ve como en las películas, donde los cuarentones empiezan a vestirse como adolescentes, a cambiar sus comportamientos y a gastar dinero en cosas llamativas, sino que puede ser una etapa en la que la felicidad, el bienestar y la satisfacción pueden bajar, y esto tiene que ver con el hecho de que muchas personas ya no se perciben como jóvenes, y piensan que eso les cierra muchas puertas y posibilidades, o se sienten ansiosas por no haber logrado lo que creen que ya deberían tener para este punto.
La crisis de los 40 y 5 hábitos para prevenirla
Hacer ejercicio y mantenerte activo
El ejercicio físico es bueno para el cuerpo, ayuda a prevenir la pérdida de masa muscular, permite controlar el peso y tener una buena salud, pero también es muy bueno para la salud mental, ya que libera dopamina, reduce el estrés y aumenta la autoestima y la seguridad.
Algunos expertos creen que lo hacemos y nos sentimos viejos porque dejamos de movernos, y hacer ejercicio es la mejor forma de combatir eso. Además, mantenerte
físicamente activo a lo largo del día hace que tu cuerpo se sienta bien. Por si eso no fuera suficiente, la ciencia encontró que el entrenamiento de fuerza es un factor clave para la longevidad.
Prácticas de gratitud y aprender algo nuevo
Cosas como el journaling o hacer una lista de las cosas por las que estamos agradecidos también permite disfrutar más de la vida, mantener una actitud positiva y sentirnos más motivados y felices. Lo que pasa es que, cuando practicamos la gratitud, dejamos de enfocarnos en lo malo, en lo que no funciona, en lo que no nos gusta o lo que no tenemos, y empezamos a ver todas las cosas buenas que hay en nosotros y en nuestro alrededor, y eso no hace más felices.
Healthline también recomienda buscar algo nuevo para aprender, ya que esto activa tu mente, hace que te sientas emocionado por algo y te da un sentido de logro y de orgullo. Prueba algo que siempre habías querido hacer, pero que no habías intentado antes.
Cuidar tu salud mental y manejar el estrés
Todas las personas, independientemente de su edad, deberían reservar algo de tiempo para cuidar su salud mental y para poner en práctica estrategias de control del estrés.
El estrés no solo nos afecta emocionalmente, también se ha demostrado que acelera el envejecimiento y puede causar muchos problemas de salud, así que hay que recurrir a la meditación, a los hobbies, a los ejercicios de respiración o a lo que sea que ayude a controlarlo.
Por otro lado, muchos problemas de salud mental pueden aparecer conforme envejecemos (Healthline habla de depresión entre las personas de 40 a 60 años), así que es importante estar atentos a esto, y considerar si es necesario ir a una terapia, buscar un grupo de apoyo o encontrar formas de cuidar esto.
Establecer nuevas metas
La psicología dice que tener metas es uno de los factores que nos hacen más felices. Llegar a ellas es bueno, pero es más importante tener siempre un objetivo y algo por lo que estamos trabajando y luchando, que nos de razones para seguir haciendo un esfuerzo.
Lo que hay que hacer es que, cada vez que llegues a una meta, te tomes un tiempo para celebrar ese logro, para después pasar a hacer un análisis y determinar un nuevo objetivo.
Una vida social activa
Bien lo dijo uno de los estudios más importantes de la Universidad de Harvard, los buenos amigos son lo que realmente nos hace felices, además de que las relaciones son buenas para la salud mental y la longevidad.
Así que hay que aprovechar cada momento para cultivar nuestras relaciones, para pasta tiempo con las personas que disfrutamos y que nos hacen sentir bien, y para socializar un poco durante el día.
Fuente. gq.com