La regla del 20% y sus 6 rituales para proteger la conexión con tu pareja
Domingo, 1 de diciembre del 2024
Fortalecer la conexión con la pareja y lograr mantenerla con el pasado del tiempo es lo que ayuda a que la relación sea duradera y a que se mantenga estable y feliz con el paso de los años, incluso cuando se atraviesa por momentos complicados o por cambios importantes.
De acuerdo con John Gottman, uno de los mayores expertos en relaciones alrededor del mundo, y The Gottman Institute, establecer rituales de pareja es una gran herramienta para trabajar esa conexión y volverla profunda y fuerte, para que la relación se pueda disfrutar más y para que las adversidades no lleven a la destrucción de la relación, y para que esta no se deteriore por falta de cuidados, de atención y por falta de interés.
Los rituales diarios, según Gottman, ayudan a que podamos moldear nuestras vidas y relaciones de una forma más positiva, además de que convertir la relación en una prioridad y llevan a que podamos dedicarle suficiente tiempo y atención a la pareja.
Por otro lado, Mark Travers escribe en Psychology Today que se puede usar una regla del 20% para proteger la relación y esa conexión, y que de ella se pueden desprender rituales diseñados para que esa conexión no se pierda. Y hay que recordar que las buenas relaciones son un factor clave para la felicidad, así que hay que proteger las que lo son.
¿Cuál es la regla del 20% para proteger la conexión con tu pareja?
La regla del 20% parte del principio 80-20, que no solo aplica para las relaciones y puede llevar al éxito en muchas otras áreas de la vida.
Travers dice que siempre hay que tener en cuenta que el amor y las relaciones evolucionan, cambian con el tiempo y pueden enfrentarse a problemas o a necesidades distintas, y que es por esto que la regla del 20% es una herramienta de la que todas las parejas se pueden beneficiar.
“El principio 80/20, también conocido como principio de Pareto, postula que una pequeña cantidad de comportamientos, interacciones o inversiones emocionales clave son responsables de la mayor parte de nuestra felicidad y satisfacción. En otras palabras, no todos los momentos de una relación son iguales”, escribe el psicólogo.
¿Qué quiere decir esto? Que las acciones que parecen pequeñas son las que pueden brindar los mejores resultados. 20% de tu esfuerzo causa e mayor impacto, pero solo cuando usas ese 20% de la manera correcta.
6 rituales para proteger la conexión con tu pareja
Según explica Travers, existen 6 rituales de pareja que las relaciones necesitan para mantenerse fuertes y conectadas, ya que son los más significativos y los que realmente van a ayudar a que ese vínculo se mantenga fuerte y no se pierda.
• Rituales compartidos de unidad: son rituales para estar juntos y compartir tiempo, como tomar un café juntos por la mañana o tener una práctica de gratitud.
• Momentos intencionales de silencio: no se trata simplemente de no hablar, sino de usar el silencio de forma deliberada, lo que ayuda a fortalecer la relación. Se trata de no intentar llenar los espacios de silencio, sino de aprovecharlos para pensar y para elegir mejor nuestra forma de hablar o de reaccionar, o simplemente para disfrutar de un momento juntos.
• Curiosidad y descubrimiento: se trata de hacer preguntas que los lleven a pensar, a profundizar y a descubrir cosas nuevas de la pareja, lo que vuelve la relación más profunda.
• Actos de apoyo emocional: consiste en estar ahí para tu pareja cuando lo necesita, escuchar, dar consejos y acompañar en los malos momentos, en los buenos, cuando hay logros o algo que causa estrés.
• Juego espontáneo: el juego y la diversión con la pareja también ayudan a fortalecer la conexión y a construir relaciones más felices y que se sientan jóvenes, así que hay que hacer espacio para jugar un poco y para no ser tan serios siempre con la pareja.
• Momentos pequeños de conexión física: no solo se trata de sexo o de gestos grandes, sino de pequeñas señales de afecto que se demuestran de forma física, como tocar el hombro de la pareja al despedirse, tomar su mano mientras hablan para demostrar calidez y cercanía, o tener un pequeño gesto que sea solo suyo para demostrar cariño.
Fuente. gq.com