Sábado, 3 de mayo del 2025
Sabemos que el tiempo libre se ha vuelto un lujo. Por eso, cuando decidimos desconectarnos, merecemos hacerlo de forma consciente. Chanel lo entiende perfectamente, y ha creado un refugio que responde a ese deseo de parar y dejarse cuidar: Chanel Privé.
Ubicado en El Palacio de Hierro, Chanel Privé es mucho más que un espacio de belleza, es un santuario dedicado al bienestar de la piel. Aquí, la maison despliega toda su maestría en tratamientos faciales y corporales a través de protocolos exclusivos que combinan alta eficacia con una relajación profunda y sensorial.
Cada sesión es una invitación a reconectar con uno mismo. Desde el diagnóstico personalizado hasta la aplicación precisa de sus fórmulas más icónicas, el viaje que propone Chanel Privé va más allá del cuidado estético: es una experiencia que despierta los sentidos y redefine el arte del bienestar.
Los detalles están pensados para darte una experiencia personalizada, desde tratamientos exprés hasta rituales completos de bienestar. Para quienes buscan un momento de pausa en medio del día, existen sesiones de tan solo 15 minutos enfocadas en zonas específicas como las manos o el contorno de ojos—una solución eficaz y elegante para revitalizar la piel en tiempo récord.
Pero si lo que deseas es el facial perfecto, aquí lo vas a encontrar. La carta de tratamientos incluye opciones para cada tipo de necesidad: hidratación profunda, luminosidad inmediata, revitalización intensa y piel visiblemente unificada. Cada protocolo ha sido diseñado con la precisión y el expertise que solo CHANEL puede ofrecer.
Y si el objetivo es una desconexión total, su masaje corporal es, sin exagerar, una joya sensorial. Inspirado en el universo olfativo de CHANEL, este ritual utiliza aceites finamente formulados que no solo reflejan tu estado de ánimo, sino que también elevan la experiencia a una dimensión emocional. Tras la sesión, la piel queda maravillosamente suave, profundamente hidratada.
Este 10 de mayo, olvídate de lo típico. Regálale a tu mamá algo que realmente disfrute: un momento solo para ella en CHANEL Privé. Porque el self-care también se hereda.
Fuente: quien.com