Las claves para vestir como millonario en tus vacaciones de playa
Martes, 17 de junio del 2025
Contrario a lo que podrías creer que es la clave para vestir como millonario, no necesitas un guardarropa compuesto por prendas de lujo tapizadas de logos y un sin fin de accesorios de oro. En realidad es más una cuestión de buen gusto y un poco de inteligencia, en especial cuando se trata de los looks de verano para la playa.
Hemos visto suficientes temporadas de The White Lotus como para saber qué es lo que usaría un millonario en sus vacaciones y créenos, una camiseta con el logo de Versace impreso en toda la superficie no es precisamente a lo que elegirían para ir de la habitación al restaurante del hotel.
Pero, ¿qué deberías tener en cuenta si quieres vestir como millonario? Además de invertir en buenos básicos libres de monogramas y logos, te sugerimos seguir estos consejos, pues hemos descifrado las claves de estilo del lujo silencioso.
Si algo hemos aprendido de los hombres más ricos del mundo es que el minimalismo es la pieza central de su estilo. Alejados de los logotipos y los estampados llamativos, estas personas suelen vestirse de manera discreta y sofisticada.
Para seguir sus pasos, una forma de hacerlo es con looks monocromáticos. Una camisa de lino blanca, con pantalón color crema y sandalias negras de cuero son todo lo que necesitas para evocar la riqueza de personajes como Kendall Roy.
El lino es un textil sofisticado y, sobre todo, transpirable. Es por eso que esta tela es la favorita de los hombres más adinerados, en especial durante sus vacaciones de playa, pues permite mantenerse fresco y evitar esas horribles manchas de sudor en la ropa. Si bien las prendas de lino suelen ser más costosas que las de poliéster o las de algodón, vale la pena hacer una inversión, ya son de mayor calidad y sus características las vuelven mucho más elegantes. Además, son totalmente versátiles.
Un reloj es imprescindible
Un buen reloj es el mejor amigo del hombre, o al menos eso creemos en GQ México y Latinoamérica. Pero en lo que respecta a hombres millonarios, eso se traduce a piezas de culto y joyas de marcas de lujo poco conocidas, por ejemplo Timothy y Victoria Ratliff lo confirmaron en The White Lotus con sus Rolex Day Date a juego.
Así, si quieres verte como ellos, sugerimos que estas vacaciones lleves contigo tu mejor reloj. No tiene que ser una pieza cuyo valor supere el medio millón de pesos. En realidad, un elegante reloj de vestir o un diver de acero puede ser más que suficiente. Marcas como Longines, TAG Heuer y Tudor ofrecen la posibilidad de acceder a piezas de relojería suiza por mucho menos de 100,000 pesos.
Cuidado con los estampados
Si has llegado a este apartado habrás adivinado que los estampados llamativos no están a discusión. Si realmente quieres verte como un millonario de buen gusto, no solo debes evitar los logos y monogramas en la ropa, cualquier otro tipo de motivo gráfico deberá ser inspeccionado con lupa. Olvídate de la vieja camiseta de tu banda favorita y las extravagantes camisas de seda que se albergan en tu closet, para tus próximas vacaciones de playa lo mejor será empacar prendas minimalistas, sin estampados o con motivos sencillos como lunares, rayas, entre otros.
Los hombres millonarios no son como el turista promedio que viene y va con un par de sandalias. No es que este tipo de calzado sea de mal gusto o esté prohibido, sino que debes limitar su uso a determinadas situaciones: alberca, playa y ciertos eventos casuales —solo si el modelo en cuestión es un elegante par de sandalias de cuero—. Por lo demás, te recomendamos empacar un par de mocasines café o zapatos náuticos —que combinan con todo—, y unos tenis blancos para dar variedad a tus atuendos de playa.
Al estar la mayoría del tiempo con contacto con el agua, elegir el traje de baño adecuado es crucial. Todos los consejos anteriores se pueden trasladar a esta sección. Los colores neutros son la mejor opción para verte más sofisticado. Si quieres algo más divertido, puedes optar por piezas de tonos más brillantes, pero sólidos, es decir, sin estampados, logos, etc.
Fuente: gq.com