Jueves, 10 de noviembre del 2022
Si eres de esas personas afortunadas a las que le suelen ocurrir cosas muy mágicas, quizá alguna vez en tu vida te has encontrado en la calle, en un jardín o el bosque a una libélula pese a que es muy raro verlas como el caso de los colibríes.
De ser así, debemos decirte que efectivamente cuentas con mucha suerte, ya que este curioso y colorido insecto que habita cerca de charcos, lagos, ríos y pantanos, es poco probable de ver en ciudades grandes, ya que suelen concentrarse (en el caso de México) en lugares tropicales como Veracruz, Oaxaca o Chiapas.
Con un promedio de vida de 7 a 56 días (así es, ¡qué triste!), las libélulas además de ser hermosas y tener colores muy hipnotizantes y eléctricos, esconden un significado espiritual que cualquiera que las vea tiene el privilegio de llevar consigo.
¿Qué significa ver una libélula?
La libélula es un símbolo de equilibrio. Se asocia a los cambios y a la auto-realización, por lo que regularmente se dejan ver cuando una persona está pasando por un momento de transformación positiva que ayuda a la evolución personal y espiritual.
En Japón, los Samurai la utilizan como un símbolo de poder gracias a su agilidad para volar y moverse. En China, En China, se le asocia con la armonía y la buena suerte. También, algunos creen que las libélulas son portadoras de mensajes.
Por otro lado, hay quienes aseguran que este insecto es un ‘animal medicina’ que protege la salud mental, espiritual llevando en su lugar mucha armonía y emociones positivas.
La palabra libellula consiste en un diminutivo de libella que significa el nivel de una balanza, lo que significa una capacidad para mantener el equilibrio. Una de las características físicas que apuestan a ello son sus cuatro alas de casi el mismo tamaño.
Al ser seres que habitan en el agua, también representan la relajación y el inconsciente.
Fuente:culturacolectiva.com