Las 10 reglas de etiqueta que debes conocer y aplicar para brillar en sociedad

Miércoles, 17 de mayo del 2017

 Las 10 reglas de etiqueta que debes conocer y aplicar para brillar en sociedad

Aceptémoslo. La gran mayoría de nosotros nos sentimos algo perdidos cuando debemos enfrentarnos a eventos de etiqueta, como una cena formal o una boda. Encontrarnos frente a una colección de tenedores que no sabemos en qué orden utilizar puede ser bastante atemorizante. Pero la verdadera etiqueta va más allá de eso. Tiene que ver con la educación y la consideración hacia terceros. Por eso, aquí te dejamos diez imprescindibles reglas de etiqueta que te ayudarán a sentirte cómodo en cualquier situación.

1: Sé puntual

Puede parecer bastante obvio. Pero la puntualidad y la consideración hacia el tiempo de los demás es uno de los pilares fundamentales no sólo de la etiqueta. Sino de la educación más básica. Tú puedes llegar tarde por un sinfín de razones, pero también tienes un sin fin de oportunidades de organizar tus tiempos para no hacer esperar a tu cita o anfitrión por más de 5 minutos. ¿Tienes una emergencia? Avisa con toda la antelación que puedas. Y si definitivamente se trata de algo fuera de tu control, pide disculpas sinceras.

2: Utiliza los cubiertos adecuadamente

La regla es increíblemente sencilla. Se utilizan de afuera hacia adentro. Si existen cubiertos en la parte superior del plato, resérvalos para los postres. Las copas van del lado derecho, también en orden. Por suerte, el mesero sabe qué va en cada una. Utiliza un poco de sentido común, y, si tienes dudas, no tengas miedo de preguntar.

 
3: Olvídate de utilizar el celular en la mesa
 

Si te encuentras en una reunión o cena elegante, seguramente es porque alguien consideró invitarte a un evento importante de su vida para que lo pudieras compartir con esa persona. Sabemos que en los tiempos actuales es difícil despegarnos del teléfono. Pero por educación y cortesía, debes de darle toda tu atención a las personas que te rodean en ese momento. Ponlo en silencio o en modo avión, y dedícate a disfrutar la cena y la compañía.


4: No seas remilgoso con la comida

Puede que el plato que te pongan enfrente no sea precisamente de tu agrado. Pero lo menos que puedes hacer para no ser grosero es aceptarlo con una sonrisa y comer una porción pequeña. Si definitivamente es algo que “no te pasa”, puedes argumentar, sin decir que no te gusta, que no puedes comerlo por prescripción médica o dieta.

5: Lleva un detalle

A excepción de las bodas y otras fiestas de salón, en las cuales es de pésimo gusto llegar con el regalo (para eso existen las mesas de regalo), si te invitan a una comida o una cena debes de llevar algo. Lo ideal es preguntar a tu anfitrión qué hará falta al momento de la invitación, así te puede asignar un postre o una botana. Pero aunque insista en que no lleves nada, prepara, al menos, una botella de vino.


6: No dejes cubiertos dentro de tazas o vasos

Se ve fatal. Las cucharillas están pensadas para revolver el café y luego dejarlas en el plato del postre. Mucho menos uses una cuchara con residuos de pastel para remover el contenido de una taza.

7: Espera a que todos tengan su plato servido

Si estás en una cena, no comiences a comer hasta que todos los comensales tengan su plato servido. En ocasiones, el anfitrión insistirá en que comiencen mientras él termina de servirse a sí mismo, pero lo correcto siempre es esperarlo, y ofrecerle algo de ayuda con la mesa.

8: No te auto invites

Es de muy mal gusto llegar a un sitio sin avisar, y sin ser invitado. En particular, evita hacer visitas inesperadas a la hora de la comida, pues por educación tus anfitriones te invitarán a comer, pero no sabes qué problemas le implique al cocinero sacarse de la manga una porción de comida que tal vez no estaba contemplada.

9: Acomoda correctamente los cubiertos al terminar

La simbología de los cubiertos sobre el plato al terminar la cena es muy clara. Por eso, debes conocerla bien, así evitarás mandar por accidente el mensaje de que no te gustó.


10: Evita llevar niños

A menos que la invitación indique expresamente que son bienvenidos, ni los niños ni sus travesuras suelen ser bienvenidos en los eventos formales. Evítale un disgusto a tu anfitrión y deja a tus pequeños con la niñera.

¡Listo! Sigue estos consejos y brillarás por tu educación y buenas maneras en cualquier sitio.

Fuentes: http://relaciones.elartedelaestrategia.com, https://s-media-cache-ak0.pinimg.com, http://static.vix.com, https://s-media-cache-ak0.pinimg.com
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